Caacupé, IP.- La Iglesia Católica dirigió este miércoles su mensaje, durante el tercer día del novenario de la Virgen de Caacupé, a los jóvenes paraguayos, a quienes llamó a “mantener viva la memoria de su pueblo, para no repetir hechos trágicos del pasado y construir una sociedad basada en la justicia y la paz”.
El obispo de San Lorenzo, Joaquín Robledo, realizó la homilía de este miércoles bajo el lema: «Los jóvenes llamados a mantener viva la memoria de su pueblo». El religioso recordó primeramente las palabras que el papa Francisco quien dijo este año en Cracovia que “un joven sin memoria es un joven sin futuro”.
En ese sentido dijo que los jóvenes paraguayos que tienen que conocer sus raíces, su origen, la identidad de paraguayos “para no repetir hechos trágicos del pasado y construir una sociedad basada en la justicia y la paz”.
Indicó que junto a la tradición, el folclore y la música paraguaya, igualmente hay que “mantener la tarea evangelizadora que se realizó desde los comienzos del descubrimiento, de la conquista y de evangelización de nuestros pueblos latinoamericanos y el pueblo paraguayo”.
Los instó también a escuchar otras “historias no contadas” como la de los indígenas y de las mujeres que son muchas veces las más marginadas en la sociedad.
El religioso agregó que en todos los momentos históricos del país fueron los jóvenes en gran parte los protagonistas principales y que son los jóvenes los que tienen capacidad de construir una nueva sociedad, un Paraguay renovado y justo.
“Hoy se nos invita a todos nosotros, a muchos jóvenes por sobre todo, a escuchar esta llamada del Señor así como en aquel tiempo aquel Jesús joven invitó a algunos jóvenes a seguirle y hoy se nos invita a mantener viva la memoria de nuestro pueblo”, dijo.
Destacó que los jóvenes tienen un corazón grande lleno de ideales y es por eso que el Señor Jesús pone su mirada en ellos. “Así como puso su mirada en los apóstoles, así también Jesús les mira y les llama porque cuenta con ustedes, necesita de ustedes para llevar el mensaje de Dios a todos”, concluyó.