Asunción, IP.- Con presencia del presidente de la República, Horacio Cartes, se dio inicio este lunes al Año Académico 2015 del Instituto Superior de Educación Policial (Isepol) mediante un acto que tuvo lugar en el Patio de Honor “Oficial Inspector OS. Rodolfo Colmán Rejala” del Campus de la Educación Policial Ñu Guazú, Luque.
Durante el acto, el director del Isepol, comisario general director Silvio Escobar, destacó el compromiso de la institución de poner «el máximo empeño y dedicación para que al final el periodo académico del presente año salgamos con una capacitación mejorada».
Afirmó que la educación, el respeto, la disciplina y el patriotismo son algunos de los «valores innegociables» en esta casa de estudios en su objetivo de «entregar policías más profesionales a la sociedad paraguaya».
Destacó que el proceso de mejoramiento y modernización de la formación del personal policial iniciado con la optimización continua del sistema de selección de los futuros ingresantes al cuadro permanente de la Policía implica ahora la revisión de la malla curricular de cada uno de los institutos así como el contenido programático de las materias.
«Hemos pasado a la siguiente etapa, a fin de obtener un perfil de salida adecuada para poder afrontar los nuevos desafíos de la función policial encaradas conforme a la política de gobierno, la estrategia de seguridad ciudadana del Ministerio del Interior y el plan estratégico de la Policía Nacional», dijo.
El Isepol cuenta actualmente con un campus educativo que ofrece carreras de pregrado, tres carreras de grado, dos especializaciones, dos maestrías, así como un instituto de idioma, un centro de capacitación permanente y una escuela de pilotos.
«La licenciatura en seguridad pública es la carrera élite y pionera en la profesionalización policial ya que tiene como misión la formación técnica, científica y táctica, proporcionando conocimientos, actitudes, valores, habilitades y destrezas requeridas para el desempeño del oficial de policía», explicó Escobar.
Finalmente sostuvo que los nuevos paradigmas de la educación superior exigen el inicio de un proceso transformacional en todos los niveles, asumiendo que el estudiante debe ser el centro de todo proceso pedagógico, mediante el impulso y la estimulación de la educación activa y práctica, de modo a obtener profesionales versátiles y competentes.
«Otro desafío que pretendemos incorporar son las tecnologías de información y comunicación mediante la alfabetización digital», concluyó.