Asunción, IP.- La empresa Verofen S.A., que produce derivados de maní bajo la marca Kelwá, se encuentra desde hace 64 años en la ciudad de Filadelfia, departamento de Boquerón, con un marcado compromiso con su comunidad y la región del Chaco, a lo que ahora suman planes de aumento de producción y de venta en la Región Oriental.
La actual administración está conformada por el matrimonio de Ferdinand y Verónica Ekkert, bisnieta del fundador de la fábrica, Kornelius Neufeld, en 1953. Los Ekkert decidieron dar un impulso a la fábrica y asentarlo como una parada de interés en el distrito de Filadelfia.
La cartera de productos corresponde a turrones de maní y a cinco tipos de manteca, todos productos sin gluten, señaló Ferdinand Ekkert en declaraciones a la Agencia IP durante una visita a la fábrica.
La fábrica produce alrededor de 20.000 turrones al día, de los cuales los principales rubros son para las meriendas escolares en los departamentos de Boquerón, Ñeembucú y Caazapá.
El maní es un producto muy energético, razón por la que iniciaron desde hace cinco años la provisión de meriendas en las escuelas de Boquerón unas dos veces por semana, explicó Ferdinand. Además de propietarios de la fábrica, los Ekkert son directores de una escuela agrícola en el distrito de Filadelfia.
Sólo con las meriendas escolares de Boquerón llegan a más de un millón de turrones al año. Desde hace tres años, los productos Kelwá son también parte de la merienda de escolares de Ñeembucú y Caazapá.
Desde este año, la empresa se abre mercado en comercios de la capital, mediante un acuerdo con una distribuidora. Actualmente los productos «Kelwá» pueden ser encontrados en Casa Rica, supermercados La Bomba, entre otros.
Visitas a la fábrica y producción
La producción es realizada de manera manual. La fábrica emplea a 27 miembros de la comunidad indígena La Paz, por lo que los propietarios evitan el trabajo mecanizado y dejarlos sin empleo, señalaron.
El trabajo de selección del maní se realiza bajo estrictos estándares y respetando las certificaciones. La fábrica precisa unos 200.000 kg de maní al año, que son adquiridos de productores de la zona.
El producto final, ofrecido bajo el nombre Kelwá, conserva la receta familiar inspirada por sus bisabuelos, señaló Verónica Ekkert. Desde hace unos años, los actuales dueños decidieron dar un impulso a la fábrica y prepararla para una producción en cantidad.
El establecimiento se encuentra preparado para recibir visitas que observen el proceso de elaboración mediante pasarelas. La intención es ofrecer la oportunidad de conocer también la vida en la comunidad de Filadelfia, con la que los propietarios y empleados se encuentran ligados.
La fábrica opera a un sexto de su potencial, señaló Ferdinand. De tres líneas de producción, una se encuentra activa y la intención es aumentar la producción a medida que más mercados se vayan abriendo.
En cuanto a venta en el exterior, recibieron interés de Canadá pero aún no hay nada concretado. No obstante, Verofen S.A. recibe la asistencia del Ministerio de Industria y Comercio para encontrar mercados internacionales.