Montevideo.- Los expresidentes uruguayos Julio María Sanguinetti, Luis Alberto Lacalle y Jorge Batlle pidieron hoy a la Organización de Estados Americanos (OEA) que impulse una Misión de Observación para las Elecciones Parlamentarias de Venezuela y se interese por la situación de los presos políticos en ese país.
En concreto, Sanguinetti (1985-1990 y 1995-2000), Lacalle (1990-1995) y Batlle (2000-2005) enviaron hoy una misiva al secretario general de la OEA, el uruguayo Luis Almagro, expresando su posición ante la situación de Venezuela, país gobernado por Nicolás Maduro.
«Los suscritos expresidentes solicitan a Usted que impulse en el seno de la OEA, de acuerdo con el mandato de sus documentos constitutivos y la Carta Democrática, la constitución de una Misión de Observación para las Elecciones Parlamentarias que se deben realizar en los próximos meses en Venezuela», comienza la carta.
Los exmandatarios definen ser conscientes de que una «gran corriente de demócratas latinoamericanos» aspira a contribuir con el «fortalecimiento de las instituciones» en el continente, «en especial en Venezuela».
Al tiempo que propiciar «una participación activa de la OEA en instancias electorales como es habitual en otros países, con misiones de la mayor calidad técnica».
«Solicitamos asimismo, que en cumplimiento de sus responsabilidades y de acuerdo con el mandato que en la protección de los Derechos Humanos debe cumplir la OEA, se interese por la situación de Leopoldo López, Daniel Ceballos y Antonio Ledezma, quienes se encuentran detenidos por motivos políticos», agregaron.
A su juicio, estos detenidos «deben ser parte del proceso electoral de referencia, en pleno uso de sus derechos cívicos».
Sanguinetti y Batlle forman parte del opositor Partido Colorado, mientras que Lacalle integra el también opositor Partido Nacional (PN).
Jaime Trobo, diputado del PN y encargado de la redacción de la carta por iniciativa de los exmandatarios, explicó a Efe que esta fue enviada al secretario general de la OEA «esta misma mañana».
«La iniciativa fue del expresidente Lacalle, él tomó contacto con Batlle y Sanguinetti. Se encargaron la redacción de un texto y estuvieron de acuerdo con el alcance, el contenido, los términos y que fuera rápido», añadió Trobo, para quien, que tres exmandatarios manifiesten «una preocupación conjunta» tiene un valor político «muy importante».
Los opositores venezolanos López y Ceballos están encarcelados desde principios de 2014, acusados por hechos de violencia durante las protestas antigubernamentales de principio de ese año, que dejaron 43 muertos entre seguidores oficialistas, opositores y ciudadanos sin adscripción política aparente.
Los dos políticos se encuentran en huelga de hambre desde hace dos semanas, un ayuno que han asegurado que no romperán hasta que el Gobierno de Maduro cumpla con una serie de peticiones, entre ellas la fijación de la fecha de las elecciones parlamentarias que se deben realizar este año y la presencia de observadores internacionales en las mismas.
Por su parte, Ledezma, acusado de «conspirar» contra el Gobierno de Maduro, fue detenido el pasado 19 de febrero y estuvo preso hasta el 30 de abril, cuando pasó a estar bajo detención domiciliaria.