Zurich.- El sitio oficial de la FIFA destaca en portada el resurgir albirrojo de la mano de Ramón Díaz, según entiende. Sumida en la posición 80 del ranking cuando asumió el pelado, tras la Copa América ascendió al lugar 55º en el último escalafón difundido a comienzos de mes. De cara a las eliminatorias advierte que el adiestrador prometió ser competitiva a la selección paraguaya, «Y cuando promete, generalmente cumple…», remata la nota.
Cuando el pasado mes de marzo Ramón Ángel Díaz calificó como «una locura» que Paraguay apareciera en el puesto 80° de la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola, sus palabras sonaron a frase hecha. Algunos, incluso, tomaron a esa afirmación como un intento de enamorar a los paraguayos, que esperaban ansiosos su debut como seleccionador albirrojo.
Pero el Pelado, que había asumido el cargo a fines del año pasado, fue más allá. «Con la calidad de jugadores y material que tenemos, creo que saldremos de esa situación muy rápidamente», agregó el argentino con relación al Ránking FIFA, justo antes de los amistoso internacionales contra Costa Rica (0-0) y México (0-1).
Sin embargo, Díaz ha honrado su palabra: en la última edición del escalafón, seis meses después de aquel vaticinio, Paraguay ocupa el 55° lugar, su mejor ubicación desde agosto de 2014. Ese mes, tras ver la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™ por televisión, apareció en el puesto 47°, y desde ese entonces comenzó un tobogán descendente que el técnico usó para motivar a su gente.
Razones, más allá de palabras
El resurgir futbolístico de Paraguay comenzó a tomar forma antes de la Copa América 2015. En la previa del torneo, Díaz bajó una idea y un mensaje claro para sus jugadores. «Queremos consolidar un grupo, una estructura que sirva en el tiempo y que sea una selección a la que la tengan que volver a respetar. No vamos a defraudar al hincha».
Como primera medida, y pese al mal paso en las eliminatorias para el Mundial de Brasil, ratificó la confianza a tres históricos del equipo: así, Justo Villar, Paulo Da Silva y Roque Santa Cruz, quienes totalizan más de 340 partidos internacionales entre sí, fueron los pilares alrededor de los cuales armó el grupo que viajó a Chile.
A ellos los rodeó de valores menos veteranos pero con experiencia en la selección, caso el zaguero Miguel Samudio (28 años), el volante argentino nacionalizado paraguayo Néstor Ortigoza (30) y los atacantes Lucas Barrios (30) y Nelson Haedo Valdez (31). Para completar el plantel, liderados por el talentoso media punta Derlis González (21), elPelado le dio vuelo a jóvenes valores como los defensas Bruno Valdez (22) y Fabián Balbuena (23), y el mediocampista Oscar Romero (23).
Y Ramón cumplió otra vez: Paraguay recuperó el respeto a fuerza de resultados, al terminar segunda e invicta en el Grupo B. Allí empató con la subcampeona mundial Argentina 2-2 (tras levantar un 0-2), venció a Jamaica 1-0 e igualó con la campeona defensora Uruguay 1-1. Eliminar a Brasil por penales en cuartos de final, luego de empatar 1-1, significó una de esas alegrías que la afición paraguaya extrañaba.
Conclusiones de cara al gran objetivo
Ni la goleada sufrida ante Argentina en semifinales (1-6), ni la derrota con Perú en la final de consolación (0-2), modificaron las conclusiones de Ramón Díaz tras el torneo. «Llegamos como invitados para quedarnos tres días y nos quedamos un mes. Veníamos en el puesto 85 en el Ránking FIFA y hoy estamos entre los cuatro mejores de la Copa América. Fuimos protagonistas y quedamos muy contentos con lo que hicimos», afirmó el seleccionador, siempre punzante a la hora de declarar, antes de saber que su Paraguay ascendería 29 posiciones en el mes de julio.
«Lo que más satisfecho nos deja es la experiencia», continuó el Pelado sin perder la sonrisa, una característica de su personalidad. «El equipo jugó bien y tuvo carácter contra rivales importantes como Argentina, Uruguay y Brasil, evaluamos a varios futbolistas… Todo sirve para analizar el futuro y lo que tenemos que hacer en las eliminatorias».
Desde entonces, Paraguay disputó un amistoso ante Chile en Santiago, que se saldó con caída por 3-2. «Resultó positivo: llevamos a la mayoría de jugadores del fútbol local, algunos que ni me conocían, y fue una oportunidad de transmitir la idea que queremos», explicó el técnico. Si bien reconoce que falta tiempo de trabajo, Díaz es optimista de cara a la primera doble jornada del clasificatorio rumbo a Rusia 2018, en la que será visitante de Venezuela y luego local de Argentina. «Vamos a ser muy competitivos», prometió. Y cuando promete, generalmente cumple…
(ip/fifa.com)