Pretoria.- La noticia de que el deportista sudafricano Oscar Pistorius abandonó antes la prisión donde permaneció encarcelado 10 meses, sorprendió hoy aquí a medios nacionales y extranjeros apostados en espera de su salida del centro correccional.
Pistorius, quien fue condenado a cinco años de cárcel por el homicidio de su novia Reeva Steenkamp el 14 de febrero de 2013, pasó al régimen de libertad condicional desde anoche.
Manelisi Wolela, funcionario de Servicios Correccionales, confirmó que él ya no está en el penal de Kgosi Mampuru, de Pretoria, y que regresó a casa. Una decisión que se «tomó en beneficio de todas las partes», precisó.
Antes, la Junta de Libertad Condicional analizó la totalidad de los argumentos, incluyendo los de la familia de la víctima, muerta a tipos en casa de Pistorius hace dos años.
«Tras una cuidadosa consideración de los hechos (…) la Junta de Libertad Condicional decidió colocar al señor Oscar Pistorius bajo supervisión correccional a partir del 20/10/2015 hasta el 10/20/2019», precisó en su momento la dependencia en un comunicado.
La salida de Pistorius se prolongó durante casi dos meses porque el 21 de agosto, cuando debió aplicarse el procedimiento, el ministro de Justicia, Michael Masutha, pidió una revisión al considerar que se había actuado prematuramente.
Pistorius, de 28 años, tiene las dos piernas amputadas desde los 11 meses por un problema genético.
Alcanzó fama mundial en los Juegos de Londres de 2012, cuando se convirtió en el primer corredor en la historia en competir en unas Olimpiadas con atletas no discapacitados. Posee las marcas mundiales en las pruebas de 100, 200 y 400 metros lisos para deportistas que sufrieron una doble amputación.
Sin embargo, el atleta paralímpico podría recibir una pena más dura de prosperar una apelación del Estado en el Tribunal Supremo en noviembre respecto a la pena de «homicidio culposo».
Algunos periodistas dicen que por el vuelco que dio su historia, pasó de «héroe a villano».
De momento, la salida temprana de Oscar Pistorius del Kgosi Mampuru evitó una avalancha masiva de prensa, pero los corresponsales y las cámaras están ahora alineados frente a la casa en Waterkloof a la espera de alguna noticia.