Proclamación de Venezuela es una maniobra imprudente y carece de autenticidad

Asunción, IP.- Para el parlamentario paraguayo del Mercosur, Alfonso González Núñez, la decisión unilateral e inconsulta de Venezuela de proclamarse como sucesor de Uruguay en la presidencia pro témpore del Consejo Mercado Común (CMC), es una maniobra imprudente y carente de autenticidad fundada en la ausencia del imprescindible consenso.

González recuerda que el traspaso de mandato semestral se realiza en oportunidad de la reunión cumbre de Jefes de Estado del Mercosur, cita desierta ya que no fue convocada en su momento por Uruguay.

Menciona que si bien el artículo 12 del Tratado de Asunción al igual que el 5 del Protocolo de Ouro Preto estipulan que “la Presidencia del CMC se ejercerá por rotación de los Estados Partes y en orden alfabético, por periodos de seis meses”; no obstante la automaticidad jurídica de los actos no procede cuando se revelan cuestionamientos, disensos y omisiones deliberadas de las normas vinculadas.

Como antecedente refiere que, frente a la falta de acuerdo, Uruguay había apelado a una solución intermedia: no transferir la presidencia a Venezuela como tampoco continuar ejerciéndola, circunscribiéndose a informar, por nota dirigida a los cancilleres de la región fechada el 29 de julio del año en curso, que ha concluido su mandato, originándose, en consecuencia, la disponibilidad de la titularidad del bloque.

“Se presentarán graves inconvenientes que amenazarán el normal el funcionamiento de la unión, ya que corre peligro la presencia de representantes de todos los estados en los organismos técnicos como el Grupo Mercado Común (GMC) y la Comisión de Comercio del Mercosur (CCM)”, alerta el parlamentario.

Agrega que la Presidencia de la Delegación de Paraguay en el Parlamento del Mercosur rechaza el ejercicio de la presidencia pro témpore por parte de Venezuela en estas condiciones, considerando la falta de aprobación e internalización de numerosas normas comunitarias, entre las cuales se encuentran acuerdos de complementación económica y aduanera, sumándose a esto las graves denuncias de violación de los derechos humanos y de alteración del orden constitucional.

Afirma además que desconocerá la actuación del país caribeño mientras se analizan alternativas para resolver la transferencia de la presidencia que a falta de consenso podría quedar en suspenso hasta diciembre.

Indica que una opción válida sería que Argentina asuma inmediatamente, conforme a la rotación alfabética.

También refiere que la élite del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) debe entender que ninguna medida que involucre a la comunidad Mercosur podrá tomarse en soledad sin el conocimiento y el consentimiento del pleno.

“La democracia aunque gravemente lacerada aún está con vida en Venezuela, y la  mediación de buena fe en los trances prolongados e insolubles de un homólogo, no comporta en absoluto injerencia en jurisdicción interna sino un esfuerzo persuasivo y legítimo orientado a estimular la recapacitación y la identificación con los valores primordiales de la coexistencia urbana y el disenso respetuoso”, concluye.