Asunción, IP.- El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, anunció que se realizará un análisis exhaustivo de los mecanismos para implementar la “Ley Anita”, toda vez que se sancione en el Congreso Nacional y sea promulgado por el Ejecutivo. Aclaró que la ley busca promover la donación y garantiza la libertad de elegir no ser donante, «un derecho irrevocable de cada persona».
“Nadie va a ser forzado a nada y no olvidar lo importante, qué es el trasplante, es la posibilidad de multiplicar vida, de mejorar la calidad de vida, hay gran aceptación con esta idea», dijo el ministro.
El ministro explicó los parámetros que serán considerados para la implementación de la ley en los servicios, la formación de profesionales y sobre las libertades que se deben otorgar en el caso de que las personas no quieran ser donantes.
Sostuvo que se debe realizar la preparación de hospitales y formación de equipos, además de establecer un cronograma para realizar las intervenciones. “Hospital Nacional, Clínicas, e IPS son los servicios que tienen equipos entrenados y ahora con la ayuda de una ley que proponga un presupuesto importante tendremos mayores facilidades para abordar esta arista”, dijo Mazzoleni.
El proyecto, que actualmente se encuentra en estudio en la Cámara de Diputados, busca modificar varios artículos de la Ley Nº 1.246/1.998 de trasplantes de órganos y tejidos anatómicos humanos, de modo que todas las personas sean donantes de órganos a menos que dejen sentada su opción de no donar mediante un registro.
Sobre este punto, el ministro dijo que la iniciativa legislativa establece simplemente que las personas son donantes salvo que hayan sentado por escrito su voluntad en contrario. «Esto implica que los familiares no pueden revocar ese deseo”, remarcó el ministro de Salud.
Paraguay, una de las tasas más bajas de donación
Por su parte, el director del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT), Gustavo Melgarejo, destacó que la mencionada ley también apunta a crear conciencia y agilizar los procesos de modo a mejorar las tasas de donación que en Paraguay que son una de las más bajas de la región, con apenas 12 donantes por año.

Asimismo mencionó que se prevé crear herramientas para estructurar el modelo definitivo respecto a la captación de órganos, es decir contar con equipos a nivel país con todas las comodidades que puedan aumentar la cifra de trasplantados.
“La donación es una cuestión de muchas emociones, ya que al propio médico le cuesta mucho por ejemplo una situación de tragedia, cuando no se dan los resultados esperados, todo esto requiere de una capacitación a los profesionales para que puedan saber comunicar las diferentes situaciones a las familias en los hospitales”, detalló en declaraciones a Radio Nacional del Paraguay.
En ese sentido dijo que implica varios procesos que van desde contar con el presupuesto necesario, así como los profesionales capacitados para llevar a cabo este tipo de intervenciones, siendo esta una de las falencias, ya que se tienen pocos médicos especializados en trasplantes.
“Debemos de crear también el núcleo, es decir de los coordinadores de trasplantes que hacen las gestiones hospitalarias con los equipos, de tal forma que el procedimiento sea eficiente y contar con resultados exitosos”, añadió.
Mencionó que es un tema muy complejo, pero hizo hincapié en que lo más importante es que se pueda crear conciencia y haya mayor cantidad de donantes para que el sistema crezca.
Lamentó que muchas de las familias se nieguen a donar los órganos de su ser querido, siendo que esta práctica solidaria “de hacer el bien sin mirar a quien”, puedan darle a vida a muchas otras personas.
“La pérdida de un ser querido es algo que uno lo vive de diferentes formas pero se ha comprobado científicamente que la gente que dona con el tiempo desarrolla un alivio emocional por haber salvado vidas con ese acto”, expresó finalmente.