Asunción, IP.- El martes 18 tuvo lugar en el Congreso Nacional la ceremonia de entrega de distinciones a los “Maestros del Arte del Cabildo” en su edición 2019.
La distinción Maestros del Arte es el máximo reconocimiento que otorga anualmente el Centro Cultural de la República El Cabildo (Ccrec), extensión cultural del Congreso Nacional.
El presidente del Legislativo, senador Silvio Ovelar, ofreció las palabras alusivas y luego recibieron sus diplomas y flores de manos de la directora de El Cabildo, Margarita Morselli, y del senador Ovelar, los flamantes Maestros del Arte 2019: Maribel Barreto, en letras; Lucy Yegros, en artes visuales; Silvio Rodas, en teatro; Dominique Von Thumen, en danza y Felipe Sosa en música.
Los homenajeados y el público presente recordaron con un cerrado aplauso a los maestros y recordaron la reciente partida del Maestro del Arte por El Cabildo, Ricardo Migliorissi, y a las recientes ausencias de los maestros Osvaldo Campercholi y Luis Saldaña.
Haciendo uso de la palabra, el maestro Felipe Sosa afirmó que “tal vez se otorgue un reconocimiento a alguien que no lo merece porque siempre ha tenido grandes maestros pero lo recibo y agradezco de corazón”.
A su vez, Dominique Von Thumen señaló que “un trabajo es algo que uno no lo hace solo, en esta sala están muchas personas que hacen posible ese trabajo y otras que ya no están. Este es un enorme trabajo que lo seguimos y seguiremos haciendo”.
La escritora y docente Maribel Barreto manifestó su felicidad al verse rodeada de colegas y amigos que celebraban con ella esta distinción. También recordó a aquellos que ya “escribirán en las pizarras del cielo”. “Me comprometo a seguir luchando por hacer conocer nuestra literatura dentro y fuera de nuestro país”, afirmó.
El Maestro del Arte, Silvio Rodas, agradeció a sus padres, amigos y colegas “a los que están y no”. “Hago teatro, amo el teatro y me alegra que aquí se comience a reconocer el trabajo de los nos dedicamos a esto”, puntualizó. A su vez, la Maestra del Arte Lucy Yegros refirió emocionada que “el silencio es la mejor manera de expresar lo inexpresable”.
El momento artístico, bajo la dirección del Maestro Gabriel Grazziani contó con un grupo de cámara de la Orquesta Sinfónica del Congreso Nacional (OSIC), junto con la interpretación de Ariel Insfrán.