Asunción, Paraguay, Agencia IP.- La Dirección Nacional de Aduanas (DNA) ejecutó el 85% de su presupuesto del 2020, pese a la difícil situación planteada por la pandemia realizó inversiones en infraestructuras y adquirió insumos necesarios para el buen funcionamiento de las distintas reparticiones de la institución.
La DNA, como todas las demás instituciones del Estado se ha abocado en redireccionar y reprogramar los objetivos previstos inicialmente, ajustando los mismos a los sucesivos decretos del Poder Ejecutivo que fijaban dentro de la Ley de Emergencia Sanitaria topes a ciertos gastos con el fin de racionalizar los mismos.
A pesar de esto, Aduanas ha ejecutado normalmente las inversiones en infraestructuras, uno de los ejes del Plan Estratégico institucional, así como también realizó la adquisición y aprovisionamiento en tiempo y forma de los demás insumos y bienes necesarios para el buen funcionamiento de las distintas reparticiones de la institución.
De esta forma, se ha logrado una ejecución del 85% del presupuesto, cuyo nivel podemos considerar como muy aceptable por la pandemia y con todas las restricciones que fueron impuestos por el Gobierno Nacional.
En efecto, se han realizados pagos a los funcionarios en tiempo y forma, llamados a concursos o licitaciones para la adquisición de bienes y servicios requeridos por las distintas dependencias de la DNA, apoyo logístico a las dependencias de la Institución y principalmente en la provisión de insumos sanitarios para evitar la propagación del covid-19.
Como una de las gestiones relevantes en época de pandemia se puede mencionar, el inicio y la ejecución normal y sin retrasos del primer edificio corporativo propio de la Dirección Nacional de Aduanas, DNA 1 Costanera.
Según datos oficiales del Ministerio de Hacienda, el promedio de la ejecución presupuestaria del ejercicio 2020 de los Organismos y Entes del Estado (OEE) ha sido del 79%, por tanto, la ejecución del 85% que ha obtenido Aduanas se ubica por encima de la misma, a pesar de los ajustes y priorizaciones realizadas por la coyuntura sanitaria y la imprevisibilidad de los ingresos, considerando el gran impacto causado por la pandemia en el comercio exterior, especialmente en las importaciones que constituye la base de las recaudaciones aduaneras.