Madrid.-Grandes festivales en pandemia fueron un error caro en Cataluña que ahora paga el precio en forma de toque de queda, con epicentro en Barcelona, cuando los casos de covid aumentan en una quinta ola a lo largo de España.
“Las cosas no se han hecho bien”, dijo el ministro de Salud catalán Josep Maria Argimon, en una entrevista en Catalunya Ràdio, donde ha hablado de la alta tasa de contagios en la comunidad. «Tendríamos que haber reaccionado antes», admitió.
Grandes festivales en época de pandemia, como el Vida, el Cruïlla y el Canet Rock fueron «un error” y aclaró que “no lo repetiría”.
España intentar frenar la quinta ola de coronavirus que puede afectar al turismo en plena temporada veraniega
Por ahora, según el diario La Vanguardia, los datos preliminares de estudios que se llevaron a cabo durante los eventos no revelan que hayan tenido un gran impacto. Pero el hacinamiento de gente bailando y cantando compuso un cuadro preocupante.
Ahora, incapaz de atajar la escalada de contagios por coronavirus, Cataluña volverá a aplicar desde este viernes noche y por al menos siete días un toque de queda nocturno que afectará a Barcelona y a varias localidades muy turísticas de esta zona de España.
El toque de queda será entre la 1 y las 6 de la mañana, hasta el próximo 23 de julio, y en 161 municipios.
Entre ellos se encuentra Barcelona y también localidades costeras muy turísticas como Salou, Sitges y Lloret de Mar.