Personas privadas de libertad obtienen unas 230 crías de aves de corral para la venta

Asunción, Agencia IP.- En la Granja Penitenciaria Itá Porá de Emboscada, cuatro personas privadas de libertad atienden un módulo avícola que genera al mes unas 230 crías de aves de corral para la venta local. La actividad de reinserción intramuros opera bajo la modalidad del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria que implementa el Ministerio de Justicia.

La producción se realiza durante todo el año. Para alcanzarla, el establecimiento utiliza el método tradicional de producción, a más de contar con tres incubadoras con capacidad de producción o incubación de 100, 120 y 60 huevos cada una (280 en total).

Se requiere, además, un mínimo de aves. Esto exige que actualmente, haya 400 aves de corral, entre gallinas caseras, ponedoras, parrilleros, codornices y patos que se encuentran dentro del programa de avicultura.

En el rubro diversificado de gallinas de raza Brahma que se está criando con gran éxito, existe una cantidad de 50 aves, entre polluelos, juveniles y adultos, a cargo exclusivo de dos PPL.

La comercialización se da en comercios locales, en la antigua penitenciaria regional, así como, venta a particulares de la zona, todo gestionado por los propios internos y el coordinador de Bienestar y Reinserción Social.

Se venden huevos, polluelos, las aves en sí, así como la carne, con el propósito de obtener ingresos para las PPL. Dichas ventas se realizan en un 50 % de la producción, lo restante queda para seguir aumentando la producción.

Se destaca el apoyo y acompañamiento diario de la dirección del penal, cuyo titular es Hermes Servín. También, el asesoramiento técnico y supervisión a las PPL en los procedimientos de producción y venta, tareas de mantenimiento, precauciones de seguridad y salud, llevadas a cabo por el coordinador de la Dirección de Bienestar y Reinserción Social, Gustavo Argaña.

Trabajo de reinserción

Las personas privada de libertad que se dedican al oficio de la avicultura tienen como tarea planificar, organizar y realizar trabajos de reproducción y crianza de gallinas caseras para la producción de carne, gallinas ponedoras de huevos, patos para venta de huevos y aprovechamiento de su carne, así como, codorniz, para la venta de huevos y de polluelos.

Alimentan y suministran lo necesario para mantener los niveles adecuados de nutrición y el estado de salud de las aves. Dan seguimiento y examinan a las aves para detectar enfermedades, lesiones o padecimientos, eliminando a las aves de corral débiles, enfermas, así como muertas.

Mezclan los alimentos y aditivos, llenan los recipientes de agua y comida. Vacunan a las aves. Mantienen y limpian los espacios de los dos galpones, equipos y estructuras que se utilizan en la actividad. Recolectan, almacenan y envasan los huevos para la entrega y venta.

La labor les ocupa entre 6 a 8 horas diarias, que normalmente empieza a las 07:00 de la mañana, informó el Ministerio de Justicia.

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