Asunción, Agencia IP.- La ministra de Trabajo y Seguridad Social, Mónica Recalde, recalcó la instrucción del presidente Santiago Peña de que todos los trabajadores contratados dentro del programa Hambre Cero sean formales y tengan acceso a la seguridad social. Anunció la continuidad de los controles en el interior del país.
Tras publicar que hasta el momento más de 17.000 trabajadores están registrados y formalizados mediante contratos bajo el programa Hambre Cero, la ministra Recalde anunció que la institución a su cargo seguirá haciendo verificaciones en los departamentos del interior.
En una primera etapa, el Ministerio del Trabajo y Seguridad Social completaron las verificaciones en escuelas Capital, Central y Presidente Hayes, donde se hallaron casos de falta de seguro social, falta de pago de horas extras de trabajo, salarios inferiores a lo que establece el contrato, o falta de no dar una copia del contrato al trabajador.
«Al corte de este mes vimos que muchas de ellas están ya regularizadas. Igual vamos a continuar haciendo los controles mes a mes porque tenemos que salvaguardar la situación de los trabajadores, sus ingresos, y por sobre todo ir al interior del país para hacer las verificaciones», dijo Recalde.
Estimó que a nivel nacional en el programa Hambre Cero estarían trabajando entre 22.000 y 23.000 personas contratadas, considerando que según los pliegos de bases y condiciones para la adjudicación de las empresas encargadas de la provisión de alimentos, éstas deben contar con al menos tres trabajadores por cada 50 alumnos.
«Esto es dinero público y las empresas deben cumplir porque el requisito laboral es una obligación», remarcó la ministra del Trabajo.
Verificaciones ayudan a formalizar
Gracias a los operativos de verificación laboral realizados por el MTESS en el marco de Hambre Cero, el número de trabajadores formales en las empresas adjudicatarias creció de 5.694 a 17.132 en poco más de un mes, un incremento superior al 200% a nivel nacional.
El 94% de estas trabajadoras son mujeres —madres, tías, abuelas, hermanas— que hoy no solo sostienen a sus familias con un ingreso digno, sino que también acceden al seguro social.
“Hoy, esas mujeres no solo alimentan a los niños de sus comunidades. También alimentan el futuro de sus propios hogares con trabajo formal y protección social”, resaltó la ministra Recalde.