Asunción, Agencia IP.- El presidente de la República, Santiago Peña, destacó el posicionamiento que hoy está viviendo Paraguay en el escenario internacional, capturando la atención en distintos escenarios, y afirmó que este es un cambio importante de un país que pasa de ser observador a protagonista.
«Yo nunca había visto que Paraguay capturara la atención como está capturando y este es un cambio importante. Por muchos años el Paraguay tenía esta imagen de país aislado, no integrado, que era prácticamente un observador. Hoy el Paraguay quiere ser protagonista», dijo el presidente Peña este jueves.
En conversación con medios de prensa, el mandatario se refirió a su reciente viaje a Egipto e Italia, y destacó el lugar que le dieron al país en el histórico acuerdo por la paz en el Medio Oriente.
«El haber estado en primera fila, en una posición privilegiada que le tocó ocupar a Paraguay, fue una jornada histórica haber vivido eso desde adentro», dijo el presidente.
Así también se refirió a su visita a Italia, afirmando que en 150 de relaciones diplomáticas «nunca antes se había tenido una cercanía y una afinidad que permite construir un camino entre Italia y Paraguay».
Por otro lado destacó que en diciembre próximo Paraguay va a asumir nuevamente la presidencia del Mercosur, asegurando que esta destacada posición le permitirá afianzar su protagonismo en negociaciones de gran magnitud junto con otros bloques.
«Estamos muy cerca de que se ratifique ya el acuerdo de libre comercio y Paraguay tiene un rol protagónico en ese sentido. Estamos impulsando otros proyectos de integración, Paraguay hoy quiere ser protagonista, no quiere ser simplemente un observador», dijo el presidente.
Resaltó que lo más importante de todas estas gestiones para el posicionamiento del país es que finalmente los beneficios alcanzados ayuden a que la calidad de vida de los paraguayos mejore.
Levantamiento de sanciones y acusaciones mediáticas
Sobre el levantamiento de las sanciones al expresidente de la República, Horacio Cartes, el mandatario afirmó que esa no fue una gestión del gobierno sino una gestión privada a través de abogados que ha contratado el expresidente y que finalmente fue una decisión unilateral por parte del gobierno norteamericano. «Esto no es un punto dentro de la agenda bilateral entre los gobiernos», aseveró.
En cuanto a las acusaciones mediáticas contra la familia presidencial, afirmó que el caso se resume en manejos personales a partir de los cuales se trató de generar una historia, llevando a una exposición innecesaria a la familia.
«Es parte de la política, de la democracia, de alguna manera valida la libertad de expresión, muchas veces cruzando varios límites que uno podría pretender», dijo el mandatario.
Señaló que, en este caso, en el libre ejercicio de la prensa «se les ha ido un poco la mano» al entrar en acusaciones de índole familiar, aunque afirmó que prefiere siempre «una prensa libre, independiente, que tenga la libertad de decir absolutamente todo y finalmente la ciudadanía es la que va a juzgar qué es cierto y qué es simplemente un juego de poder para tratar de alguna manera delimitar el accionar del gobierno».