El esquema del pago de sobornos salpica a Juan Ángel Napout

Nueva York.- La frase de Loretta Lynch, la secretaria estadounidense de Justicia, es contundente: “La Conmebol pide sobornos, torneo tras torneo, desde 1991”. La denuncia contra dirigentes de fútbol, empresarios y financistas tiene detalles precisos de esa operatoria. Y uno de los contratos más escandalosos que figura en la acusación es el que se firmó en 2013 y en el que, según la investigación, una empresa pagó 110 millones de dólares en sobornos a dirigentes de la Conmebol por los derechos de transmisión por cuatro ediciones de la Copa América (2015, 1019, 2023 y la edición especial del Centenario de 2016).

La empresa involucrada es Datisa, creada el 21 de mayo de 2013, con la participación accionaria en tercios entre Torneos (Alejandro Burzaco), Full Play (los Jenkis) y Traffic Sports (Aaron Davidson). La fusión de estas tres compañías fue un modo de saldar un conflicto por esos derechos, que había incluido una demanda de Traffic a la Conmebol en una corte del estado de Florida. Cuatro días después de ser fundada, en Londres, representantes de Datisa y dirigentes de la Conmebol celebraron el contrato que en la denuncia se denomina “2013 Copa America Contract”. Datisa desembolsó 317,5 millones de dólares por los derechos comerciales a nivel global y exclusivos de las cuatro Copas América.

Para asegurarse ese contrato, siempre según la denuncia, Datisa pagó 110 millones de dólares de sobornos “a funcionarios de la Conmebol”: 20 millones por la firma del contrato, que data de 2013; 20 millones los torneos de 2015, 2019 y 2023; y 30 millones por la edición de la Copa América Centenario. Cada pago tenía que ser dividido así: “Tres millones para tres altos funcionarios de la Conmebol (su presidente y los presidentes de las asociaciones de fútbol de Argentina -Julio Grondona, en ese momento- y Brasil); 1,5 millones para los otro siete presidentes de las federaciones de fútbol restante y 500.000 dólares a un funcionario adicional’’, dice la acusación.

Entre quienes recibieron las ciomas por parte de Datisa están -mencionados con nombre y apellido en la denuncia- Eugenio Figueredo, Rafael Esquivel, Nicolás Leoz y José María Marín. Figueredo. Julio Grondona sólo figura con su cargo. Según lo estipulado en el reparto, al argentino le tocaban 15 millones de dólares.

Además habrían embolsado 7,5 millones cada uno de los entonces jefes de las asociaciones del fútbol de Paraguay, Juan Ángel Napout, y de Perú, Manuel Burga; y los actuales líderes de Bolivia, Carlos Alberto Chávez; de Chile, Sergio Jadue; de Ecuador, Luis Chiriboga; de Colombia, Luis Bedoya; y de Venezuela, Rafael Esquivel, otro de los encarcelados.
La Conmebol, que en la actualidad preside el paraguayo Napout, difundió un comunicado ante las detenciones en el que “repudia todo acto de corrupción y apoya irrestrictamente las investigaciones iniciadas respecto de supuestos actos irregulares, comprometiéndose en colaborar abierta y enfáticamente”. Napout no habló sobre la Copa América.

Quien respondió a las acusaciones de sobornos fue el presidente de la Federación de Fútbol de Chile. Jadue dijo que el dinero de la empresa Datisa fue transferido a la cuenta de la entidad que él dirige. “Por mi parte estoy tranquilo, está el comprobante de depósito”, declaró el dirigente.

(ip/clarin/elpais)