Brasilia, IP.- El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, resaltó hoy los buenos términos en su conversación con el mandatario paraguayo, Mario Abdo Benítez, sobre los proyectos estratégicos que permitirán progresar juntos al Brasil y el Paraguay.
Al término de la reunión mantenida por ambos presidentes en el Palacio de Planalto, el mandatario anfitrión señaló las «muchas cosas en común» con su homólogo paraguayo, «tanto en la política como en los valores familiares y en nuestro deseo de tener un Brasil y un Paraguay fuerte y pujante».
«Nuestros países que juntos podemos progresar y traer felicidad a nuestros pueblos», dijo al tiempo de detallar los asuntos abordados en esta reunión, en el marco de la visita oficial de Abdo Benítez al Brasil.
«Tratamos la cuestión de Itaipu BInacional, el combate al crimen organizado, la cuestión de los exiliados, el Brasil y nuestro gobierno no dará asilo a terroristas o cualquier otro bandido escondidos aquí en carácter de preso o refugiados político», dijo refiriéndose así a un asunto planteado por Paraguay, el pedido de retirar la condición de refugiado político a Juan Arrom y Anuncio Martí.
Bolsonaro igualmente detalló que conversaron sobre proyectos conjuntos en el área de la industria automotriz, y «una novedad» en la agenda, la posibilidad aprovechar el «mar de agua dulce» que representa el lago de Itaipu para producir hasta 400.000 toneladas de peces por año, una cantidad que duplicaría lo producido por la piscicultura brasileña.
«Todas estas cuestiones, las más variadas posibles, llevamos a buen término y estamos perfectamente hermanados y podemos hacer lo mejor para el Brasil y el Paraguay», dijo Bolsonaro en la declaración conjunta brindada por los mandatarios.
«Estoy muy feliz, juntamente con mis ministros, en recibir la visita del presidente del Paraguay y si Dios quiere, en el presente año, haremos una visita y esa visita con toda certeza será la piedra fundamental de uno de los puentes que construiremos juntos, mejorando y mucho la cuestión comercial y transporte de nuestros pueblos», concluyó Bolsonaro.