Pyongyang.-El régimen comunista del líder kim jong-un prometió «movilizar diversos medios, incluyendo medios físicos, para tomar acciones contundentes y sin piedad».
Se trata de una nueva respuesta a la resolución 2270, aprobada el miércoles pasado con los votos a favor de los 15 miembros del Consejo de Seguridad, que incluye las sanciones más severas en 20 años y que busca ahogar las finanzas y el comercio de Pyongyang para que renuncie a sus programas nuclear y de misiles.
Ese mismo día, Estados Unidos impuso además sus propias sanciones a Corea del Norte, penalizando a individuos o entidades vinculadas al desarrollo de su programa nuclear y de misiles balísticos.
La amenaza llegó horas después de que Kim ordenara preparar armas nucleares «para usarlas en cualquier momento» como réplica a las sanciones de la ONU, y pidió al Ejército Popular norcoreano que esté listo para realizar «ataques preventivos», según la KCNA.
Previamente, el Ejército lanzó al mar seis misiles de largo alcance desde la costa este del país en una primera réplica a las sanciones.
Estas incluyen la inspección obligatoria de cargamentos, restricciones en la exportación de materias primas, embargo del comercio de armas ligeras, prohibición de venta al país de combustible aeroespacial y sanciones financieras sobre individuos, entidades y activos norcoreanos.