Asunción, IP.- Desde su inicio en el 2016, el programa de capacitación en Educación y Deportes Inclusivos trabaja con escuelas y centros de apoyo para dar herramientas a docentes y supervisores en el objetivo de la inclusión plena de las personas con discapacidad.
El programa, organizado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional USAID/Paraguay y la Fundación Saraki, se encuentra en su fase final, habiendo trabajado con 8 escuelas y 4 centros de apoyo.
Los trabajos fueron realizados con el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), con quien se elaboró un documento que hace de compendio de todo lo desarrollado en estos dos años de trabajo, señaló Adriana Bueno, del Programa de Educación y deportes inclusivos de la Fundación Saraki.
Por otro, la Fundación también elaboró con la Secretaría Nacional de Deportes (SND) un compendio de deportes inclusivos de colaboración, con deportes mixtos, en los que participan chicos con y sin discapacidad.
En entrevista para el programa Tribuna de Paraguay TV señaló que se escogió trabajar desde el deporte, ya que es una actividad “aglutinante”. “Se trata de un intercambio y de la vivencia de experiencias, entre niños con discapacidad y aquellos que no, para que tengan un espacio en conjunto para disfrutar”, dijo.
Otra de las entrevistadas fue Estela Rodas, funcionaria de Supervisión Educativa del MEC, quien señaló se trabaja desde la cartera educativa para derribar barreras, revisando las normas de convivencia.
Agregó que existen en Asunción unas 7 instituciones focalizadas y 4 centros de apoyo a niños y niñas con discapacidad, y la intención es contar con un sistema mixto. Para ello trabajan con los padres, quienes muchas veces son los que fomentan las actitudes de discriminación, agregó.
Al respecto, se han realizado mesas de diálogo y trabajo y también la Supervisión Educativa del MEC facilitó los procesos de ayuda a padres de chicos con discapacidad para seguir trabajando en la inclusión.
Adriana Bueno agregó que la educación inclusiva se trata de contar con las herramientas para trabajar con una población diversa, por ejemplo, con 32 niños diferentes en un aula y no discriminar.
Del trabajo realizado en estos dos años, se desarrollaron lineamientos para un sistema educativo inclusivo que identifica prioridades para facilitar la aplicación de la Ley 5.136/13 de Educación Inclusiva.