Asunción, IP.- Con el objetivo de motivar la apuesta que realiza el sector privado para proveer de insumos al Ministerio de Salud, el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, visitó este miércoles tres industrias, dos de ellas textiles y otra metalúrgica, ubicados en el departamento Central. El sector proyecta emplear a unas 200.000 personas.
La jornada de visitas se inició en Luque, en la industria textil Hanace SACI, cuyo plantel en su mayoría está compuesta por mujeres jefas de hogar. Posteriormente recorrió las instalaciones de la Compañía Minera Independencia SA (Cominsa) del rubro metalúrgico, ubicado en la misma ciudad; y finalmente se trasladó hasta la ciudad de Fernando de la Mora, para conocer más acerca de la industria textil Wemasa SA.
En la ocasión, Mario Abdo Benítez, manifestó que la presencia del jefe de Estado es para incentivar, motivar y felicitar la iniciativa del sector privado que está desarrollando capacidades para hacer frente a la pandemia del covid-19. “Esta es una gran oportunidad, parte del lado positivo de la crisis es el desarrollo de la capacidad de la industria nacional”, expresó el presidente.
Igualmente señaló que a través de las industrias nacionales se generará empleo a más de 200.000 personas, mediante la producción de tres millones de batas y tapabocas para el personal de blanco.
A su turno, la ministra de Industria y Comercio, Liz Cramer, explicó que el acuerdo nacional para compras públicas en Salud centraliza la modalidad de contratación, con un precio único de modo a que las industrias tengan igualdad de condiciones.
Mencionó que el caso de la industria textil es para la confección de batas que serán destinadas a los profesionales de blanco involucrados en la atención a pacientes con coronavirus, no así para los tapabocas.
Sobre el punto, precisó que la alianza abarca a un promedio de 25 empresas, muchas de ellas tercerizadas y que con ello se brindará mano de obra a unas 2.000 personas.
“Todas las empresas deben pasar por la aprobación de Dinavisa, que ya vino y aprobó este lugar (ubicado en Luque) y posteriormente el producto específico. La pandemia nos ha demostrado que los costos no lo son todo, que varían en situaciones como estas, sobre todo la eficiencia dará lugar a la resiliencia”, expresó.
La alta funcionaria estatal destacó que la prioridad es producir todo lo necesario para enfrentar al virus en el mercado local y traducirlo en beneficios para la población, especialmente en lo relacionado a la generación de empleos. “Todas las instituciones hemos puesto de nuestra parte y ojalá que la próxima vez que nos agarre situaciones como estas ya tengamos más capacidad para enfrentarlo”, añadió.
En relación al sector metalúrgico, Cramer manifestó que se está analizando si el “acuerdo nacional” es la mejor opción o si operarán bajo un mecanismo más tradicional, que dependerá básicamente del volumen de compra.
“Porque esto se reparte entre de los asociados de este gran sector, entonces el volumen es lo que hace posible que sea rentable y posible la entrega, para ello toda una industria debe acondicionarse para poder hacerlo”, mencionó.
En ese contexto, aclaró que los metalúrgicos han realizado los prototipos de camas de acuerdo a los requerimientos del Ministerio de Salud, que se mostró conforme con las pruebas de los productos. “Vamos por buen camino también con ese sector”, subrayó.
La ministra señaló que toda la industria textil agrupada en la Asociación de Confeccionistas del Paraguay pondrá a disposición de la cartera sanitaria una amplia gama de productos, llegando a una gran cantidad de talleres y por ende de familias.
Precisó que uno de los requisitos para llegar al acuerdo nacional, es que debe tener un alto impacto social para la provisión conforme a las necesidades del Ministerio de Salud.
“Lo bueno es que la industria nacional se está adecuando a las necesidades específicas para poder proveer en Paraguay, en principio son 400 las camas que el Ministerio de Salud va a requerir”, concluyó.