Asunción, IP.- El ministerio de la Mujer, la Oficina de la Primera Dama y ONU Mujeres, lanzaron este viernes la segunda fase de la campaña “Violencia Cero” que pretende sensibilizar a la población sobre el aumento de casos de feminicidios y posicionar la problemática a nivel país.
La presentación se realizó en el marco de la conmemoración por el Día Internacional de la Mujer, fecha que visibiliza las desigualdades de oportunidades entre hombres y mujeres y reivindica el acceso equitativo a todos los ámbitos de la vida social y política.
La ministra de la mujer, Nilda Romero, explicó que la campaña pondrá especial énfasis en el feminicidio, para dar a conocer las circunstancias en las que se configura, a través de la promoción del artículo 50 de la ley 5777/16 “De proyección integral a las mujeres contra toda forma de violencia”.
Mencionó que la campaña pretende visibilizar públicamente la emergencia ante los casos de violencia y llamar a la intervención oportuna de los actores clave. “Esta campaña es muy impactante porque nos hemos visto en la obligación de causar impacto en la sociedad para que realmente nos demos cuenta de lo grave del flagelo que estamos sufriendo las mujeres paraguayas. Es necesarios que nos involucremos todos, no solamente el Estado paraguayo sino toda la sociedad en su conjunto”, expresó.
La misma comprenderá materiales audiovisuales, cartelería en la vía pública, redes sociales y medios de comunicación para alertar e interpelar y comprometer a las personas en la urgencia de acciones para rechazar la violencia en todas sus formas. La campaña abarcará todo el territorio nacional y tendrá una duración de 8 meses.
Resaltó además la incorporación de proyectos para trabajar conjuntamente con hombres en el cambio de paradigmas en la masculinidad. “Vamos a intentar ir por este camino para ver si podemos lograr que los datos lacerantes puedan reducirse en el futuro porque lo que hoy vemos es que van en aumento, porque parece que es insuficiente lo que estamos haciendo porque siguen muriendo mujeres asesinadas por sus propias parejas”, aseveró.

Por su parte, la oficial de ONU Mujeres, Sofía Cardozo, destacó el trabajo conjunto de las instituciones para poner fin a la violencia contra mujeres y niñas a nivel país. “Nos encontramos en un nivel crítico a nivel global y regional, porque sabemos que la violencia contra las mujeres está aún muy naturalizada y las cifras alarmantes nos demuestran esto, este 8 de marzo decimos que estamos en emergencia y que las mujeres tenemos derecho a vivir una vida digna sin violencia ni discriminaciones”.
La primera dama, Silvana Abdo, mencionó que el empoderamiento económico de las mujeres es fundamental para que las mujeres logren salir de los círculos de violencia. “Es importante hacer visible el trabajo que el Estado y la sociedad hace para luchar contra este flagelo tremendo que es la violencia hacia las mujeres; creemos que el empoderamiento económico y social es una colaboración importante, porque cuando la mujer sienta que no depende del hombre y que puede tener un vuelo propio”, mencionó la primera dama.
Remarcó además las plataformas que ofrece el Estado cuando una mujer es víctima de violencia. “Sabemos que hay muchas alarmas antes del golpe, el trato, la palabra, que encienden el semáforo antes de que llegue a rojo. Queremos visibilizar las plataformas de cuidado que el Estado ofrece, que sepan que hay lugares donde pueden hacer denuncias, de acogida, de protección cuando deciden denunciar y de empoderamiento para salir de una situación de violencia».
Situación de las mujeres paraguayas

En Paraguay es necesario abordar las desigualdades que sufren las mujeres en todos los ámbitos, desde un enfoque de derechos, respetando la cultura y creencias, la distribución equitativa de los trabajos de cuidado, la justa retribución y visibilidad del aporte de las mujeres a la economía y la eliminación de la violencia a las mujeres y la trata de personas.
La violencia feminicida en el país va en aumento con el paso de los años: en el año 2016 se registraron 39 feminicidios; en el 2017 50 casos, 59 en el 2018 y 9 casos en lo que va el 2019.
Los feminicidios son crímenes de odio y suceden cuando las condiciones históricas generan prácticas sociales que permiten atentados contra la integridad, la salud, las libertades y la vida de las mujeres. Son cometidos por conocidos, parientes, parejas, novios, compañeros y contribuyen al feminicidios el silencio social, la impunidad.
La violencia contra las mujeres es una de las violaciones a los derechos humanos más extendidas a nivel mundial, que se presenta de diversas formas: violencia física, sexual o psicológico. Las mujeres que experimentan la violencia, sufren problemas de salud y tienen menos oportunidades de participar en la vida pública.
La ley de protección integral a las mujeres contra toda forma de violencia implica múltiples estrategias y enfoques con el fin de que el Estado haga efectivas las disposiciones constitucionales y tratados internacionales para la igualdad entre hombres y mujeres.
