Asunción, Agencia IP.- El Centro Nacional de Quemaduras y Cirugía Reconstructiva (Cenquer) habilitó este jueves el «Aula Hospitalaria Nuevo Amanecer» y el «Rincón de Juegos», sitios destinados para que los niños, niñas y adolescentes que se encuentran internados puedan seguir estudiando mientras dure su tratamiento y curación.
En el acto inaugural, el ministro de Salud Pública, Julio Borba, manifestó su satisfacción al habilitar los nuevos espacios en el Cenquer, ya que el Aula Hospitalaria otorgará a niños y adolescentes la atención escolar necesaria mientras dure su proceso de hospitalización, de modo a no interrumpir su proceso educativo y evitar también la deserción escolar.
«La finalidad de Aula Hospitalaria es reducir las consecuencias negativas de la hospitalización, entregando un acceso flexible a los planes de estudio correspondiente a su curso y garantizando el derecho del niño a recibir educación», explicó Borba.
Reiteró que el objetivo es evitar el ausentismo escolar y la repetición del curso de los niños que deben hospitalizarse por periodos de tiempo prolongados.
«Este es un paso fundamental para el mejoramiento integral de los pacientes y es sin dudas un modelo a replicar en los servicios con internación prolongada. Es un modelo de esperanza hacia la recuperación a una vida normal luego del hospital», refirió.
El ministro de Salud refirió que el Aula Hospitalaria e Inclusiva está reconocida y habilitada por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) y que ello beneficiará de manera directa al cerca de 60% de los infantoadolescentes que son hospitalizados en el centro de referencia nacional para pacientes con quemaduras.
En cuanto a la inversión que requirieron los nuevos espacios sostuvo que ascienden a G. 100 millones que fueron obtenidos por medio de fondos de donaciones voluntarias y de autogestión.
Borba afirmó que la adaptación estructural se realizó en base a un proyecto realizado por profesionales relacionados al área de la construcción y educación que en algún momento fueron pacientes del Cenquer.
A su turno el director de Educación Inclusiva del MEC, César Martínez, manifestó que ningún ciudadano puede quedar fuera del proceso educativo por ninguna condición o situación y que por medio de la habilitación de este tipo de espacios se garantiza ese principio del proceso de la educación inclusiva.
«La experiencia de Paraguay y la evidencia científica a nivel internacional demuestra el impacto afectivo que tiene en el niño el estar en aula y preocuparse por su tarea y no solo por cuestiones que hacen a su condición de salud. Aquí estos niños podrán distraer sus mentes en otro elemento que no sea solo su patología y eso es fundamental», reconoció.
Dijo que a la par del Aula Hospitalaria se irá implementando el proyecto «Quien cuida al cuidador» que contempla contención psicológica a los docentes que prestarán servicios en las aulas hospitalarias.
Martínez sostuvo que el desafío con que cuenta el MEC para impulsar con más fuerza el año que entra serán la de fortalecer el primer curso del Aula Hospitalaria en el Sistema Educativo Nacional.
El director del Cenquer, Saúl Zaputovich, afirmó que las inauguraciones cursadas en la fecha son «un logro importante y anhelado en beneficio de los pacientes, con el fin de brindarles la mejor atención durante su internación».
Agregó que desde hace años se venía gestionado el poder contar con «un Aula Hospitalaria y que hoy se volvió realidad gracias al acompañamiento y a la ayuda de varios amigos y constante colaboradores del Cenquer».
Manifestó que «la salud y la educación van de la mano y que bien es sabido que una buena educación puede evitar una serie eventos de quemaduras que son visibles en las campañas de concienciación sobre el uso responsable de los juegos pirotécnicos».
Sobre el último punto y a modo de finalización, aseguró que en breve la institución a su cargo volverá a relanzar la campaña en vistas a las fiestas que se avecinan para este diciembre.