Asunción.- Ante la renuncia en la noche de este jueves del argentino Leonardo Astrada como entrenador del plantel principal de Cerro, se abre la interrogante en campamento azulgrana, sobre quien será el nuevo adiestrador, en un año donde el Ciclón quemó muy rápido sus naves internacionales, al no superar la primera fase de la Copa Libertadores y en lo que resta del año solo le quedan los torneros caseros, el Apertura y el Clausura.
El que se apresta a dirigir la primera práctica tras la salida del argentino, es Roberto Torres. Astrada llegó a las 8 al club y se reunió con los jugadores, a modo de despedida de la entidad.
Se sabe que el club adeuda al adiestrador y su cuerpo técnico dos meses de salario un monto cercano a los USD 100 mil. Es la única suma que llevara Leonardo, pues fue él quien renunció.
Con su salida, reviven las esperanzas de Fidencio Oviedo de volver al equipo titular, pues por un altercado grave con el entrenador saliente, fue dejado de lado y entrenaba pero sin posibilidades de jugar.
