China desata los nervios en los mercados: el petróleo cae con fuerza y toca mínimos de enero

Pekín.-El petróleo está sufriendo un nuevo descenso este lunes. Si el viernes pasado supuso el cierre de la tercera semana consecutiva de descensos para el crudo, esta semana no ha comenzado mucho mejor.

Las protestas en China contra las medidas covid-cero (represión de Pekín para contener el virus) están haciendo mella en el sentimiento del mercado, sobre todo en los futuros de petróleo, uno de los activos más sensibles a los cambios inmediatos en los fundamentales de la economía y, sobre todo, de la movilidad de los grandes consumidores como es el caso de China (mayor importador de petróleo del mundo). Las bolsas también están padeciendo esta creciente incertidumbre que rodea a la segunda economía más grande del mundo.

El petróleo Brent cae más de un 2,4% este lunes, cediendo la zona de los 82 dólares y tocando mínimos que no se veían desde enero de este año, antes de que comenzase la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Son muchos los factores que están ‘atizando’ a las expectativas inmediatas de consumo de petróleo y ninguna de ellas es pequeña.

Este lunes, la más importante, quizá, sea los problemas en China con el covid-19: mayores confinamientos que esta vez sí están teniendo respuesta de la población en forma de protestas, alguna de ellas violentas. China ha pasado de la reapertura del país a una nueva ola de confinamiento en cuestión de semanas. Los analistas de Danske Bank creen que si la población mantiene su lucha contra Pekín, este «puede ser un invierno caótico en China».

No obstante, el mercado de petróleo ya venía mostrando ciertos síntomas de debilidad, que son el reflejo de una demanda que pierde brillo a medida que la economía global (no solo China) se desacelera y de un ‘embargo descafeinado’ al petróleo ruso (se habla de un tope al precio que se sitúe cerca de los 65 dólares) por parte de la Unión Europea. Este embargo no reduciría de forma material la oferta global de petróleo en el mundo, puesto que el crudo ruso podría seguir fluyendo de forma rentable con las sanciones.

«El sentimiento en el mercado del petróleo sigue siendo negativo, y los acontecimientos del fin de semana en China ciertamente no ayudan. China continúa registrando muchos casos diarios récord de covid, lo que ha provocado que algunas ciudades endurezcan las restricciones de movilidad. Es probable que los informes de las protestas en China también resulten perjudiciales para la confianza», sostienen desde ING.

El gran catalizador de este lunes, al menos, está siendo China. La indignación en las redes por la muerte de 10 personas en el incendio de un edificio, aparentemente confinado, de la ciudad de Urumqi (noroeste) ha desencadenado en vigilias y protestas en numerosas partes del país, entre ellas ciudades importantes a nivel político y económico como Pekín o Shanghái.

De este modo, la agencia de calificación de crédito Moody’s hizo hoy referencia al posible impacto económico de las protestas: «Esperamos que las protestas en diversas ciudades chinas se disipen de forma relativamente rápida y sin resultar en violencia política grave», indicó el vicepresidente de Moody’s Investors Service, Martin Petch.

«Sin embargo, tienen potencial para afectar negativamente a la calificación crediticia (de China) si se prolongan y las autoridades responden con más fuerza. Aunque esta no es nuestra hipótesis de partida, supondría un mayor nivel de incertidumbre sobre el grado de riesgo político en China, propagándose a una dañada confianza y, por ende, al consumo, en una economía ya de por sí debilitada», agregó.

Todo ello, junto a otros factores, está afectando de forma notable a los mercados: «Una curva de tipos en EEUU muy invertida (avisa de la llegada de una recesión) y la caída del crudo Brent, cotizando a la baja cerca 80 dólares el barril nos dicen que los mercados están cada vez más preocupados por las tendencias de la demanda global. Y la incertidumbre en China tampoco ayuda», aseguran desde ING en su nota matutina para inversores.

Desde el banco nórdico SEB explican que el banco central de China redujo el coeficiente de reserva en 25 puntos básicos el viernes pasado, desde un promedio de 8,10% a alrededor del 7,85%, para respaldar el crecimiento del crédito. Sin embargo, es dudoso que la medida aumente significativamente el débil crecimiento de los préstamos en el corto plazo, ya que no se debe a la falta de oferta sino a la falta de demanda, que no se recuperará adecuadamente hasta que las restricciones de la pandemia se alivien materialmente».

Estos expertos creen que los inversores mostrarán ciertos nervios, mientras que esperan la reacción de las autoridades de Pekín a las protestas. Varias ciudades, como Shanghái y Shenzhen han aumentado las restricciones después del aumento del número de infecciones. Los índices bursátiles están sufriendo pérdidas este lunes, en parte debido a los acontecimientos en China.

El dólar y el yen se fortalecen ante la reducción del apetito por el riesgo, mientras que el yuan ofrece un rendimiento negativo. El tipo de cambio ‘onshore’ -negociada en mercados nacionales- cae un 0,46% frente al dólar en comparación con la última hora del viernes, mientras que la ‘offshore’, que opera en mercados internacionales como Hong Kong, baja un 0,27%.

Si China refuerza su política de cero covid y responde a las protestas, el sentimiento podría recibir otro gran golpe y conducir a un debilitamiento renovado del yuan y a la caída de los mercados bursátiles chinos. También ejercería una presión a la baja sobre los precios del petróleo y, como tal, sería deflacionario para la economía mundial», aseguran desde Danske Bank.eLEconomista.es.

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