San José.-El Gobierno de Costa Rica y los sindicatos no llegaron a un acuerdo el jueves 20 para poner fin a la huelga que lleva más de 10 días en el país, pero se volverán a reunir el 21 de septiembre, informa la prensa local.
«La idea de continuar este diálogo lo que está indicando es la voluntad de las partes de seguir en ese camino de consenso para construir la paz social que necesitamos», señaló en conferencia de prensa el sacerdote Edwin Aguiluz, mediador en el conflicto.
Tanto los representantes de los sindicatos como del Ejecutivo se reunirán el 21 de septiembre a las 16.30 GMT para continuar las negociaciones.
La huelga rechaza una reforma fiscal impulsada por el Gobierno para hacer frente a un presupuesto desfinanciado.
El presidente Carlos Alvarado pidió a la justicia que declare ilegal y señaló que la Ley Fortalecimiento de las Finanzas Públicas es el único camino para no llegar a una crisis nacional.
La norma incluye la transformación del impuesto general sobre las ventas en un gravamen al valor agregado, una modificación impositiva sobre la renta, cambios al régimen laboral de los empleados públicos y la adopción de una regla fiscal.
Dicha suma, basada en mediciones de pobreza determinadas por una variedad de países de bajos recursos, es el monto necesario para la compra de los bienes básicos de una familia.
En 1990, más de 1.9 mil millones de personas vivían bajo el umbral de la extrema pobreza o lo que representaba el 36 por ciento de la población mundial.
El reporte de la organización, cuyo propósito es reducir la pobreza mediante préstamos de bajo interés, créditos sin intereses a nivel bancario y apoyos económicos a las naciones en desarrollo, destaca los marcados cambios experimentados en las últimas décadas en lo que hace a la distribución geográfica de la pobreza.
En 1990 cerca de mil millones del total de las personas que vivían bajo pobreza extrema residían en el este de Asia, pero décadas de crecimiento económico en China y otras economías de la región han hecho que ese número caiga a 47 millones.
El sur de Asia, con la mayoría de su población en India, Paquistán y Bangladesh, ha visto caer la cifra de pobreza extrema desde 1990 de 500 a 216 millones de personas.
En lo que respecta a la región de África subsahariana, el progreso ha sido menos marcado. Su índice de pobreza ha caído del 54 al 41 por ciento desde 1990, pero su población ha crecido con tal rapidez que el número de personas que vive en extrema pobreza ha pasado de los 278 millones a 400.