Contrario a sus reivindicaciones el EPP victimiza a los pobres, afirma ministro

Asunción, IP.– El ministro del Interior, Francisco De Vargas, confirmó que en el nuevo secuestro registrado ayer en el departamento de San Pedro fueron identificados plenamente los integrantes del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Afirmó que al secuestrar a un joven de familia humilde, el grupo «una vez más contradice todas sus reivindicaciones».

En conferencia de prensa brindada en la tarde de este jueves, el ministro del Interior confirmó que el principal testigo del secuestro de Franz Wiebe (17), el colono Pedro Peters, identificó plenamente, a través de fotografías, a los integrantes del EPP como autores del hecho criminal ocurrido en la tarde de ayer en la colonia Río Verde.

«Reconoció a Osvaldo Villalba, Manuel Cristaldo Mieres, Lucio Silva, Antonio Bernal Maíz, Domingo Ovelar y Esteban Marín. De forma inequívoca que nos encontramos ante un nuevo secuestro perpetrado por integrantes del grupo terrorista denominado EPP», informó el ministro.

Refirió también que el grupo criminal solicitó un rescate de 700.000 dólares para la liberación del jóven, monto que está fuera de las posibilidades económicas de su familia. «La exigencia exagerada no es congruente con el perfil económico de la familia», dijo al tiempo de señalar que se podrían dar aún negociaciones para reducir el monto requerido.

El ministro enfatizó que, «privando de su libertad a un menor de edad, proveniente de una familia trabajadora del campo, el EPP contradice, una vez más, todas sus reivindicaciones». Añadió que «el gran porcentaje de sus víctimas son campesinos paraguayos de la clase trabajadora, muy por el contrario a quienes ellos reivindican como los ricos».

De este modo, según De Vargas, el EPP demuestra que sus supuestas reivindicaciones políticas a favor de los pobres no son más que mentiras. «Solicitan dinero para subsistir, para seguir con su proyecto político y demoníaco que lo único que ofrece es terror a la población y sobre todo a la población y la clase trabajadora de la zona más empobrecida del país», lamentó.

«Estos criminales ya tienen hastiados al pueblo paraguayo, ya han matado mucho, han secuestrado mucho», dijo.

Señaló que los organismos de seguridad manejan mucha información que no se puede hacer pública para precautelar el buen desarrollo de la investiga para la recuperación con vida de los secuestrados, pero refirió que se cuenta con participación de expertos antisecuestros e inclusive de asesores extranjeros.

«Estamos obligados y determinados a seguir trabajando, teniendo como prioridad la vida de las tres personas secuestradas. Estos asesinos ya han demostrado que son capaces de ejecutar y tenemos que tener como premisa y prioridad la vida de los secuestrados. No se trata simplemente de salir a perseguirles posibilitando que puedan ejecutar al secuestrado, hay que tomar acciones estratégicas y tener en cuenta la posibilidad de un periodo de negociación, eso no está descartado», añadió.

Finalmente el ministro descartó cualquier posibilidad de renunciar a su cargo ya que eso «solo puede traer más problemas que soluciones» por traer aparejada la necesidad de cambio de todo el escalafón operativo en una situación donde se requiere concentración para el trabajo. «Creo que es lo menos conveniente», concluyó.

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