Roma.-El canciller ruso Sergey Lavrov se entrevistó en Roma con el primer ministro italiano Mario Draghi, que está a cargo de la presidencia del G20, que agrupa a los veinte países más importantes del mundo, uno de cuyos miembros es la Argentina. Draghi habló depués con el presidente indio, Narendra Modi. El tema: Afganistán.
Los atentados de este jueves, con un saldo de más de cien muertos, entre ellos 13 soldados norteamericanos, ha hecho aún más dramática situación.
Lavrov declaró más tarde que “lo más importante para nosotros ahora es la seguridad de nuestras fronteras y la organización de la seguridad”.
El canciller ruso consideró que el G20 “refleja mejor nuestro mundo multipolar”, refiriéndose al G7 de las mayores potencias occidentales, limitado a los 7 países más industrializados. Pero estimó que Rusa quiere “entender mejor qué papel” le conceden las naciones occidentales en la reunión del G20, porque en el pasado se demostró que en Afganistan “nunca son fáciles las soluciones conjuntas”.
Lavrov insistió en que es necesario invitar a los países vecinos a Afganistan que son los que más sufren las consecuencias y “que no están comprendidos en este formato” del G20. Se refería sobre todo a la ausencia de Pakistán, de vital importancia geopolítica en la zona, que no forma parte del Grupo.
Draghi y el canciller Luigi Di Maio están preparando un “plan para el pueblo afgano” y pretenden que el G20 dé una dimensión mundial a las tratativas para prolongar ulteriores evacuaciones más allá del martes 31 de agosto, última fecha para el retiro de los ocupantes norteamericanos con sus aliados de la OTAN.Télam.