Asunción, Paraguay, Agencia IP.- Desde hace cinco años, Paraguay ha becado a 1.600 profesionales para especializarse en las 24 universidades más prestigiosas del mundo a través de las Becas Carlos Antonio López.
La principal estrategia del programa Becal consiste en generar capital humano nacional avanzado y altamente calificado para que a su retorno al país puedan brindar lo mejor del conocimiento adquirido.
La necesidad de contar con una alta capacidad de capital humano es trasversal en la sociedad, por ello, se establecieron áreas críticas e imperiosas para el Paraguay, aseguró el licenciado Federico Mora, coordinador general de Becal.
Esas áreas son ingeniería, todas sus disciplinas, también las ciencias médicas, ciencias naturales, ciencias exactas ciencias agrarias, y ciencias sociales; así como la capacitación en el exterior de 400 docentes del Ministerio de Educación y Ciencias.
“El beneficio para internacionalizar a la academia y al capital humano nacional es muy importante, por ello, todo lo que se está realizando es fundamental”, resaltó Mora en un ameno diálogo con “El ciudadano”, programa que se emite cada jueves por Paraguay Tv.
Este programa nació hace cinco años, y desde entonces se ha becado a 1.600 paraguayos para especializarse en el extranjero, incorporándose cada año a 300 estudiantes.
De los 1.600 becarios, 1.100 concluyeron sus estudios y retornaron al país, y ya empiezan a visualizarse los resultados positivos, con un aporte de excelencia para la sociedad.
Actualmente son 500 los universitarios que se encuentran estudiando en distintas latitudes del mundo, explicó el alto funcionario.
Con un recurso de 125 millones de dólares para estos cinco años de trabajo, el presupuesto de Becal parte del Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación (FEEI), lo que permite proyectar y comprometerse en el tiempo.
Las becas Carlos Antonio López hasta el momento ya han comprometido 65 millones de dólares de sus recursos, que permite establecer un calendario de convocatoria hasta el 2023, brindando seguridad y más oportunidades a profesionales estudiantes compatriotas.
El coordinador general de Becal explicó que inicialmente incorporaron las maestrías y doctorados, luego los post doctorados, seguido de la “movilidad universitaria” para que los estudiantes ya durante la carrera puedan hacer un semestre en el exterior.
Incorporación de nuevos programas
El último producto incorporado al programa es la “formación en idiomas” tanto del inglés, como el alemán, francés y portugués.
Ante los obstáculos que atraviesan muchos profesionales al momento de elegir universidades, que por no haber tenido la oportunidad de estudiar algún idioma extranjero, no pueden acceder a la beca, expresó.
“Lo que encontramos es que hay jóvenes brillantes en su expediente académico, muchos de ellos del interior del país, que no habían tenido la oportunidad de formarse en idiomas entonces se encuentran con esa barrera cuando quieren ir a Estados Unidos, al Reino Unido, Francia, o Alemania, y de ahí que creamos ese producto”, explicó.
“Sin dudas es el inglés el que tiene mayor demanda porque es el que concentra a nivel mundial a la gran academia, a la comunidad científica, a la publicación de libros, investigación; pero también están el alemán y el francés, que son referencia, y aquí en la región, que por nuestra vinculación y cercanía con el Brasil, también está el portugués”, añadió.
Refirió que hay un nuevo capítulo que será una sorpresa muy esperada es que próximamente Becal comenzará a traer programas de estudios de las universidades más prestigiosas del mundo a Paraguay para trabajar con los sectores público y privado, y sobre todo con las universidades paraguayas.
“Nosotros necesitamos que las universidades paraguayas levanten la vara en su calidad, tengan una mejor oferta de postgrado y para eso queremos, traerles a estas grandes universidades para que puedan compartir sus experiencias”, aseguró.
Reinserción laboral de los 1.100 becarios
En cuanto a las condiciones de retorno y retribución económica, las cifras son muy buenas, pero también hay todo un proceso de volver señaló el licenciado Mora.
Explicó que se cuenta con el porcentaje de reinserción laboral y las cifras de los resultados de estos compatriotas al retornar al país, que hasta ahora son 1.100 becarios.
“Ese es un gran desafío, qué pasa con ellos una vez que retornan al Paraguay y qué están haciendo los sectores privado y público para recibirlos así como la academia y universidades. Es todo un trabajo que estamos haciendo en ese sentido para que se puedan reinsertar en el ambiente laboral”, recalcó.
Manifestó que entre un 80% y un 85%, en el primer semestre de retorno, ya está plenamente inserto nuevamente, luego hay un periodo de dos años de crecimiento.
“Digamos que es ahí donde el becario va descubriendo todo el beneficio de ese roce internacional, de esa experiencia en el exterior, que lo va redituando económicamente”, indicó.
Recordó que el programa cuenta con un sistema de monitoreo, ya que cada becario tiene un contrato que por cinco años, debe permanecer en el país para trabajar en el ámbito público o privado, en la sociedad civil o en la academia ante la necesidad imperiosa de contar con un capital humano calificado, que es trasversal en la sociedad.
“Hay que aclarar que aquí hay que llegar, sudar, ganarse la confianza en el lugar de trabajo, y ahí se van haciendo camino, lo que nosotros creemos es que nuestros becarios tienen una ventaja porque tienen mayores herramientas pero aparte de eso tienen que hacer todo el camino”, remarcó.
Comentó que aquellos que viajaron en el 2015 y retornaron en el 2016 o 2017, hoy ya tienen tres años de vuelta en el país, y ellos sí están evidenciando lo que implicó esa estadía en el exterior, y las ventajas o herramientas que le brinda esa experiencia, porque están comenzando a destacarse en diferentes instancias.
Situación de compatriotas en el exterior ante la covid-19
Sin dudas este también fue un año atípico y de muchos desafíos para Becal como instancia que vela por el cuidado de los becarios, sino también para los becados mismos y sus propias familias.
En ese sentido, dijo que el programa se ha tenido que adaptar a la nueva normalidad y brindar la mayor flexibilidad posible, ya que la pandemia afectó a todo el mundo.
“Debimos atender cada caso para que ningún becario nuestro se quede atrás, para que ninguno pueda truncar sus estudios, y ver qué ofrecía su universidad y nosotros ver cómo adaptarnos a esos”, mencionó.
Desde marzo hasta la fecha han tenido numerosos casos donde las universidades cerraron las puertas hasta el año siguiente y se vio si podían culminar sus estudios de manera virtual, en sus lugares de destinos o repatriarlos en vuelos humanitarios.
Es así que varios paraguayos retornaron desde Europa o Estados Unidos, con dos vuelos humanitarios cada uno. Igual situación se dio con los becarios que vinieron de Chile y de diferentes puntos del planeta, quienes luego de regresar al país hicieron los 15 días de cuarentena.
Otras universidades continuaron con clases semi presenciales, con prácticas puntuales, pero que luego se vieron obligados a cerrar, donde se los garantizó la manutención a cada estudiante.
“También casos donde ya culminaban sus estudios y no podían volver a Paraguay, tuvimos gente que volvió seis meses después y ahí entra la ansiedad y la familia y un poco toda esa administración emocional, y lo que hicimos fue garantizarles los recursos al día a todos ellos, extender el seguro médico a todos ellos, y ahí mucho contacto con nuestras embajadas y consulados y ver qué oportunidad de vuelos había”, remarcó.
Actualmente son 500 los becarios en el exterior, algunos ya regresaron a sus universidades ya desde el mes de septiembre otros en octubre y noviembre. Mientras hay otro grupo que reiniciará las clases en enero de 2021.
“Hemos logrado articular ese escenario para que el becario tenga la confianza en lo que estamos haciendo, pero hacerlo de forma muy conversada”, puntualizó el licenciado Mora.