En una jornada histórica, el Reino Unido despide a la Reina Isabel II

Londres.-Gran Bretaña y el mundo despiden este lunes a la reina Isabel II, en un funeral de Estado que reúne a presidentes y reyes, príncipes y primeros ministros. Se espera también hasta un millón de personas en las calles de Londres, donde se dará el último adiós a la monarca, que murió el 8 de septiembre tras 70 años de reinado que definieron toda una época.

Poco después del mediodía británico comenzó la procesión que llevará el féretro rumbo al Arco de Wellington, sitio final de descanso de Isabel. Está conformada por 142 oficiales y tomará cerca de 45 minutos en terminar su recorrido.

Los portadores del féretro sacan el ataúd de Isabel de Westminster mientras la ceremonia de Estado llega a su fin. Fue llevado desde la Abadía para ser colocado en el Carruaje Artillero del Estado.

Mientras el féretro se movía lentamente por la abadía rumbo al carro de armas, el Rey y la Reina Consorte los siguieron en procesión hasta la Gran Puerta Oeste junto con otros miembros de la Familia Real.

Tras un sermón del arzobispo de Canterbury, Justin Welby, el Reino Unido guardó dos minutos de silencio y se escuchó el himno nacional en la abadía de Westminster.

El funeral de Estado de Isabel II, con la presencia de la familia real británica, jefes de Estado de numerosos países, primeros ministros, reyes y príncipes, empezó este lunes en la Abadía de Westmisnter, en el centro de Londres.

El féretro con los restos de la reina, fallecida el 8 de septiembre, fue transportado desde el Salón de Westminster (en el Parlamento), donde estuvo abierta varios días la capilla ardiente, en una cureña tirada por más de cien marineros de la Marina británica.

El rey Carlos III y sus tres hermanos, la princesa Ana y los príncipes Andrés y Eduardo, así como los príncipes William y Harry, nietos de Isabel II, caminaron junto al féretro. Los príncipes Jorge y Carlota desfilaron asimismo al lado de sus padres, los príncipes de Gales.

El ataúd permanecerá cubierto con el Estandarte real, la corona imperial; el orbe real, pieza que representa al mundo cristiano; el cetro de oro, que simboliza el poder; y una corona de flores.

El funeral está a cargo del deán de Westminster, David Hoyle, quien destacará la dedicación de Isabel II como jefa de Estado durante siete décadas, antes de pronunciar la bendición.

El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, será quien pronuncie el sermón, antes de que el Reino Unido guarde dos minutos de silencio y se escuche el himno nacional en la abadía.

El funeral se celebra en presencia de los reyes de España, Felipe VI y Letizia; del presidente de EE.UU., Joe Biden; del jefe de Estado de Francia, Emmanuel Macron; así como de los reyes de Holanda, Guillermo Alejandro y Máxima; y los reyes de Bélgica, Felipe Matilde, entre otros dignatarios del mundo.

Sobre las 6:45 de este lunes el féretro con los restos de la reina Isabel II fue llevado desde el Salón de Westminster, la parte más antigua del Parlamento británico (Londres), hacia la cercana Abadía de Westminster, donde se celebrará el funeral de Estado.

El ataúd fue colocado sobre una cureña de la Royal Navy de 1901, que fue tirada mediante cuerdas por más de cien marineros de la Marina (Royal Navy), mientras que detrás caminaron el rey Carlos III y sus tres hermanos, la princesa Ana y los príncipes Andrés y Eduardo, así como los príncipes Guillermo y Harry, nietos de Isabel II.

Mientras avanzaba la procesión, miembros de regimientos escoceses e irlandeses tocaron gaitas, y a ambos lados del recorrido había miembros de la Marina, en una colorida ceremonia marcada por la pompa y la solemnidad.

Miles de personas se han instalado en Londres y Windsor para ver de cerca el cortejo fúnebre de Isabel II con motivo del funeral de Estado, que se celebra con la asistencia de presidentes, reyes, príncipes, primeros ministros y otros dignatarios.

A lo largo de las calles por donde pasará el cortejo, miles de personas, muchas portando banderas británicas, han pasado la noche para ocupar el mejor lugar a fin de ver pasar el féretro.

Después del servicio religioso en la Abadía de Westminster, el cortejo fúnebre emprenderá rumbo hacia el Arco de Wellington, próximo al palacio de Buckingham, que se espera tenga toda la pompa reservada para un funeral de este tipo, en el que participarán, además de la familia real, representantes de las tres fuerzas armadas: la Marina, el Ejército y la Real Fuerza Aérea.

Desde el Arco de Wellington, el cortejo, ya en un coche fúnebre, seguirá hasta la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor (a las afueras de Londres), donde la reina descansará junto a la tumba de su marido, el duque de Edimburgo.Clarín.

Compartir: