Buenos Aires.- El expresidente uruguayo Julio Sanguinetti calificó de «penoso» el respaldo de su homólogo José Mujica al candidato oficialista a la Presidencia argentina, Daniel Scioli, y elogió a los aspirantes opositores en una entrevista publicada hoy.
«Un cambio sería excelente: el buen cambio de (Sergio) Massa, el buen cambio de (Mauricio) Macri», dijo Sanguinetti al diario Clarín, en referencia, respectivamente, a los líderes de los frentes opositores Unidos por una Nueva Alternativa (Una) y Cambiemos.
«Yo creo que cualquiera de los dos intentará por lo menos un cambio hacia una normalidad, hacia una modernidad mayor», remarcó, aunque admitió que fue un error político que la oposición no haya estado «más unida» para aumentar sus posibilidades de ganar los comicios presidenciales.
Sanguinetti, quien gobernó Uruguay entre 1985-1990 y entre 1995-2000, subrayó que para su país «las relaciones con Argentina y Brasil son fundamentales» y denunció que el kirchnerismo ha mostrado «un cierto menosprecio» en el vínculo bilateral.
Por ese motivo, aseguró que para él «es penoso» que Mujica viajase la semana pasada a Argentina para respaldar la candidatura de Scioli de cara a los comicios presidenciales del próximo 25 de octubre.
Aún así, opinó que el candidato oficialista es una persona «más sensata» que la actual mandataria, Cristina Fernández, y su difunto marido y predecesor en el cargo, Néstor Kirchner.
A juicio del exlíder del Partido Colorado, los doce años de gobiernos kirchneristas en el terreno institucional han sido «nefastos» y señaló que «si una parte de la Justicia no hubiera resistido los embates que resistió del Gobierno, hoy la Argentina era Venezuela, porque no estarían (los diarios) Clarín y La Nación saliendo la calle».
En el ámbito económico, sostuvo que Argentina desaprovechó una década de prosperidad internacional y «en lugar de haber pegado realmente un gran salto hacia delante, está enredada en una economía llena de artificialidades y que no logra mirar hacia el futuro de un modo positivo».
Además, lamentó que tanto Argentina y Uruguay, que fueron «la vanguardia en su tiempo en educación», hayan dejado de serlo.
Según Sanguinetti, el kirchnerismo «para Uruguay sólo han sido daños» y puso como ejemplo que su país siga «encerrado adentro del Mercosur, cuando el resto de América Latina se ha ido al (Acuerdo) TransPacífico (de Cooperación Económica)».
«Atados a un Brasil sin rumbo y a una Argentina que practica en la economía una especie de nacionalismo agresivo, muy primitivo técnicamente, con esos controles de cambio y subsidios cruzados. Entonces, la pregunta es ¿cómo hacemos nosotros para poder seguir creciendo y desarrollándonos en este clima, con estas restricciones comerciales que tenemos, que nos impiden salir?», se cuestionó.
Para Sanguinetti, el acuerdo de libre comercio que negocia Mercosur con la Unión Europea «no llega nunca y es de muy difícil aplicación, dada la complejidad misma de Europa con sus veintitantos países».
Asimismo, criticó la elección de legisladores para el Parlamento de Mercosur, prevista también el próximo 25 de octubre, al considerar que «es retórica, es turismo rentado, es turismo parlamentario rentado», ya que «cuando no tenemos aún una buena relación con los estados, qué hacemos con un parlamento». EFE