Asunción, Agencia IP.- La protección social es uno de los principales ejes del Gobierno Nacional y en ese contexto se destaca el impulso que se le ha dado a los programas como Tekoporã, Tenonderã, Abrazo y Pensión Alimentaria, mediante la articulación de diversas instituciones para atender a las familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
Durante la presentación de su informe de gestión ante el Congreso, el presidente de la República manifestó que la pandemia del nuevo coronavirus trajo consigo importantes desafíos, pero también oportunidades. En ese sentido mencionó la configuración de una nueva forma de hacer políticas públicas, enfocándose en las personas, con el objetivo de darles una atención integral según cada etapa de su vida.
Así también se ha definido las acciones mediante las cuales las instituciones del Estado pueden garantizar a todos los paraguayos el acceso a sus derechos, dando prioridad a aquellos que viven en situación de vulnerabilidad. Este nuevo sistema integral ya está dando sus primeros pasos en Mariscal Estigarribia, Villeta, San Juan Nepomuceno y Santa Rosa del Aguaray, según el informe del Ejecutivo.
En la línea de la protección de las poblaciones más vulnerables, el Gobierno atendió mediante el programa Tekoporã, a 165.229 familias que se encuentran en situación de pobreza, de las cuales 28.074 son de comunidades indígenas. El programa ejecutado a través del Ministerio de Desarrollo Social (MDS) también brinda atención a personas con discapacidad, llegando actualmente a 24.630 personas.
Por su parte, el programa de promoción social y económica Tenonderã asistió en el 2019 a un total de 10.097 familias, con apoyo financiero para dar inicio a sus respectivos emprendimientos con el fin de lograr el autosustento y salir de la situación de vulnerabilidad.
Asimismo, durante el año 2019, mediante el Proyecto de Apoyo a Comedores de Organizaciones Comunitarias, se entregaron alimentos no perecederos a 182 organizaciones comunitarias de 85 distritos del país.
En esa misma línea, unas 3.300 familias y 10.000 niños reciben atención directa del Programa Abrazo a través de 43 Centros de Atención Integral a niños y adolescentes. También 207.000 adultos mayores fueron atendidos a través del Programa de Pensión Alimentaria.
Parte del informe presentado por el Ejecutivo como parte del informe de gestión anual señala igualmente que alrededor de 37.600 familias y comunidades vulnerables fueron asistidas a causa de inundaciones. Las familias recibieron alimentos, frazadas y colchones, así como insumos para las viviendas y comunidades aisladas. Así también brindamos asistencia para 686 familias víctimas de los incendios forestales en 350.000 hectáreas en las Regiones Oriental y Occidental del país.
La Oficina de la Primera Dama también concretó acciones importantes en el último año de gestión, llegando a más de 417.000 personas de forma directa en sus distintos programas y proyectos enfocados a la infancia, al empoderamiento económico y social de la mujer y al voluntariado.
En ese punto, se destaca que unos 62.000 niños recibieron atención integral, en tanto que alrededor de 9.000 mujeres recibieron las herramientas necesarias para iniciar e impulsar sus emprendimientos. También se ha fomentado el resguardo y promoción de la artesanía y emprendimientos creativos a través de numerosos proyectos.
La Oficina de la Primera Dama asumió también un rol protagónico en la región como la principal impulsora de la Alianza de Primeras Damas de Latinoamérica (ALMA), que se unieron para trabajar conjuntamente en proyectos sociales y sumar esfuerzos para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
Durante este periodo, se atendió de forma integral a 14.569 mujeres, con un total de 17.010 servicios, 145 niños/as albergados para la atención directa a mujeres en situación de violencia.
Otra de los puntos encarados por el Ejecutivo es el programa de voluntariado Paraguay Solidario que asistió a unas 340.000 personas tanto en las inundaciones pasadas como en tiempos de pandemia.
Igualmente se destaca que en el Centro Ciudad Mujer «Ñande Kerayvotý Rendá» se brindan servicios públicos de 13 instituciones a mujeres desde un enfoque sistémico, integrado e integral, bajo un mismo espacio físico. 21.000 mujeres han sido beneficiarias con más de 58.000 servicios entregados en los diferentes módulos.
“Y en el 2019 implementamos el programa Ciudad Mujer Móvil de la Gente, con el cual este año llegamos a 14 departamentos, 55 distritos y tenemos más de 35 mil mujeres atendidas”, expresó el mandatario durante la presentación de su rendición de cuentas anual.
En cuanto a las acciones en favor de la niñez de pueblos indígenas, se instaló el primer Centro de Rehabilitación para niños y adolescentes de pueblos indígenas en situación de calle y consumo de drogas en la Región “Punta Porá”, centro que es resultado de un esfuerzo conjunto del Gobierno Nacional y la Sociedad Civil y emplea además a miembros de la misma comunidad como educadores.
En el trabajo con las comunidades nativas, los esfuerzos están concentrados en satisfacer las necesidades básicas elementales de varias comunidades de pueblos indígenas identificadas como las más expulsoras de niños en situación de calle a fin de apoyar el mejoramiento de la calidad de vida de las mismas.
En ese contexto, se han extremado las medidas en aras de proteger la salud de uno de los sectores más vulnerables de la sociedad paraguaya, los pueblos originarios, con un alto acatamiento de las medidas de higiene y prevención, con excelentes resultados y prueba de ello es que a la fecha no se cuenta con ningún miembro de comunidades indígenas infectado con el covid-19.
La referida situación se debe al esfuerzo del Estado a través de la institución rectora en coordinación con otros organismos estatales para la distribución de más de 1.500.000 kilos de alimentos no perecederos, entregados casa por casa en sus respectivas comunidades. Se ha elaborado un protocolo para el ingreso a las comunidades indígenas.
Además, desde el Instituto Paraguayo del Indígena (INDI), se desarrollan los programas para la reubicación de comunidades sin tierra, donde prevemos la compra y la regularización de tierras por valor de dieciocho mil millones de guaraníes.