Asunción, IP.- El presidente del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), Justo Cárdenas, ese encuentra mediando el conflicto entre campesinos y ganaderos norteños por la posesión de dos inmuebles.
«El próximo lunes nos reuniremos con el señor Felino Amarilla para buscar una salida favorable a todos, principalmente a los campesinos que están con temor de perder las tierras que les fueron cedidas por los ganaderos, trataremos de que se cumplan los requisitos establecidos en su momento entre las partes, de tal forma a asegurar los lotes de los compatriotas», señaló Cárdenas.
Cárdenas destacó la preocupación de los pobladores de los asentamientos 1º de Mayo y Paz y Alegría ubicados en el camino Concepción-Vallemí (distritos de San Lázaro y San Carlos, departamento de Concepción) que se manifestaron desde el lunes cerrando la ruta como medida de fuerza para exigir la legalización de sus tierras, cedidas por los ganaderos Felino Amarilla y Abderrada Yambay, y ahora reclamadas nuevamente por éstos.
Los dirigentes campesinos sostienen que las 10.000 hectáreas de tierras que fueron donadas por las empresas Agropozo SA y Agroforestal Estrella SA, en mayo del 2008, están a punto de perderlas y que corren el riesgo de ser desalojados.
En declaraciones a la prensa, Hercilio Aranda, dirigente de la comisión vecinal Paz y Alegría, explicó que ambas empresas presentaron un recurso de revocación por no haberse legalizado y por el incumplimiento de las condiciones establecidas en el ofrecimiento inicial.
Aranda señaló que entre los argumentos de Amarilla y Yambay figuran que la naturaleza está depredada, que sus bienes son saqueados y que supuestamente se instalaron marginales en los asentamientos. Además de algunos brasileños que lucran con los rollos de maderas y que no se conformó la cooperativa de agricultores.
Los labriegos indicaron que no se conformó la cooperativa por falta de apoyo y anunciaron que seguirán insistiendo hasta lograr que el Indert obtenga la transferencia de las fincas.