Asunción, IP.- El director general de la Agencia de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), José Graziano da Silva, aseguró que la agricultura familiar tiene una “potencialidad extraordinaria para impulsar el desarrollo rural del país” ya que este modelo productivo representa el 80 por ciento de la producción agrícola de América Latina y genera el 50 por ciento de los empleos rurales.
Da Silva se encuentra en Paraguay hasta el próximo viernes para supervisar los proyectos que la FAO mantiene en el país, y que están relacionados entre otras materias con el empoderamiento de la mujer rural, la seguridad alimentaria, el cambio climático o la agricultura familiar.
La agricultura familiar tiene una “potencialidad extraordinaria para impulsar el desarrollo rural del país”, y por eso es uno de los puntos que apoya la FAO, explicó Da Silva en una conferencia de prensa ofrecida al término de su reunión de este miércoles con el canciller paraguayo, Eladio Loizaga.
Por otra parte, el director general de la FAO agregó que los países deben “aprender a convivir con la nueva modalidad del cambio climático y sus impactos”, tanto para coordinar acciones de emergencia, como para diseñar acciones preventivas.
Da Silva también evaluará durante su visita los modos de producción sostenible de alimentos en Paraguay y explorará nuevas alternativas de cooperación entre el Gobierno y el organismo internacional, en el marco de los principios establecidos en la Agenda 2030 de la ONU y los compromisos asumidos en cuestiones de medio ambiente.
La visita del director general de la FAO proseguirá mañana con una reunión con el presidente de Paraguay, Horacio Cartes, y se completará con entrevistas con el ministro de Agricultura y Ganadería, la ministra de Educación y la ministra de la Mujer, así como con parlamentarios y sectores de la sociedad civil.
El sector agrícola es el más importante de la economía de Paraguay, ya que representa alrededor del 25 por ciento de su producto interior bruto (PIB), señala la Agencia EFE.
Un 11 por ciento de la población paraguaya padece hambre, según la FAO, mientras que el 22 por ciento de la población del país se encuentra en situación de pobreza, lo que equivale a un millón y medio de personas, según cifras oficiales. Se trata además de un país con una “muy débil o casi nula resistencia” ante los efectos adversos del cambio climático, como sequías o inundaciones, admite el Gobierno.
Según la FAO el modelo de Agricultura Familiar representa el 80 por ciento de la producción agrícola de América Latina y genera el 50 por ciento de los empleos rurales, supone una “alta contribución en la lucha frontal contra la pobreza y la disminución de las inequidades sociales”, según un comunicado de la Cancillería paraguaya.