Asunción, IP.- La legalización de terrenos en favor de las familias campesinas, la política de puertas abiertas a todos los sectores, así como el impulso de proyectos agro-productivos para fortalecer la agricultura familiar, han sido los principales ejes del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), en el primer año de gestión.
La entrega de 885 títulos para igual número de familias y el dialogo permanente con labriegos de diferentes sectores son algunos de los logros más destacados en el área agrario, durante el primer año del Gobierno de Mario Abdo Benítez, según el informe del presidente del Indert, Horacio Torres.
De acuerdo con las proyecciones del Ejecutivo al número mencionado anteriormente se le estarían incorporando otras 500 familias cuyas propiedades serán legalizadas a través del Indert.
Asimismo se ha trabajado en la recuperación de más de 62.000 hectáreas a nivel país, que en su mayoría están distribuidas en los departamentos de San Pedro, Itapúa, Alto Paraná y Canindeyú, que también serán entregadas a los beneficiarios del estatuto agrario.
Otro de los ejes prioritarios ha sido la mediación permanente en favor de comunidades indígenas para el acceso a la tierra, teniendo como protagonistas a los líderes indígenas quienes acompañan y permiten viabilizar las solicitudes de tierras que están en trámites en el Indert.
En ese sentido se destaca la entrega del título de las 55 hectáreas de las tierras ancestrales a la comunidad indígena Río Apa, situada en San Lázaro, departamento de Concepción, que se concretó luego de 30 años de lucha.
Además unas 2.094 familias campesinas han beneficiadas con agua potable mediante la construcción de 35 sistemas de abastecimiento del vital líquido en diferentes zonas del territorio nacional.
En su informe de gestión presentado recientemente ante Abdo Benítez, el titular del Indert, hizo hincapié en el trabajo articulado con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) permitió “zanjar” los históricos problemas campesinos, donde también estuvieron involucrados otros organismos del Estado.
Igualmente el Ejecutivo, mediante una alianza entre el ente agrario y el Ministerio de la Vivienda está concretando los trámites para construir 1.000 viviendas sociales en colonias rurales que se prevén encarar desde este año, a ser destinadas a las familias campesinas de distintos puntos del país.
El apoyo permanente a la agricultura familiar para el arraigo mediante la generación de ingresos a través de proyectos agroproductivos, fue otro de los puntos centrales de la actual administración.
En ese aspecto las acciones articuladas entre diversos sectores, con la Itaipu Binacional, el MAG, así como las gobernaciones y municipios, permitieron la habilitación de 50 estanques para tilapias, cuya capacitación estuvo a cargo de una misión técnica taiwanesa.
En otra parte de su informe, Torres ratificó su compromiso con la transparencia y el fiel cumplimiento de la ley, rechazando de forma categórica las invasiones de tierras y la compra de derecheras por parte de poderosos productores.
De igual modo afirmó que hay muchas tierras por recuperar, por lo que pidió evitar las invasiones, si bien la regularización lleva sus procesos y tiempo, estas se deben realizar por la vía legal.
Manifestó que el Gobierno encara las soluciones de fondo a la problemática del campo, con un criterio de “transparencia y justicia”, aplicando la ley tanto a beneficio de los productores como a favor de inversionistas que contribuyen con su capital al desarrollo económico.
Remarcó su responsabilidad con el sector rural y apeló nuevamente al dialogo entre todos los sectores de la producción y el Gobierno para fortalecer las potencialidades y aplicar las políticas que correspondan para mejorar las condiciones de vida del campo.
Igualmente comentó que trabajan y seguirán aunando esfuerzos para recuperar la credibilidad en la institución, pese a la existencia de algunos funcionarios que siguen con las “nefastas prácticas de infidelidad hacia la institución”, subrayó finalmente.