Asunción, IP.– El expresidente paraguayo Fernando Lugo (2008-2012) informó que los médicos del hospital Sirio Libanés de Sao Paulo, Brasil, donde se trató cuando era mandatario, le declararon «clínicamente» sano y limpio de todo tipo de cáncer».
Lugo, actual senador del Frente Guasú, fue tratado con quimioterapia en 2010 y 2011 de un cáncer linfático, hasta que en julio de ese año unos exámenes médicos descartaron que la enfermedad se estuviera reactivando.
Hoy confirmó que está totalmente «limpio» de aquel cáncer.
El expresidente dijo estar «muy feliz» y agradeció a los que se preocuparon por su salud.
El ahora senador, que fuera obispo católico en la pobre región de San Pedro, donde los conflictos entre campesinos y terratenientes están a la orden del día, llegó al poder en 2008 apoyado por movimientos sociales y por una inédita alianza con el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA).
El 22 de junio de hace tres años, Lugo fue declarado culpable de «mal desempeño de sus funciones» por 39 de los 45 senadores en un proceso de juicio político.
Una semana antes de la destitución de Lugo, un operativo policial en apariencia común desembocó en un intercambio de tiros en unas tierras cercanas a la localidad de Curuguaty (sureste), donde un grupo de campesinos exigía que se aplicase la reforma agraria.
Seis policías y once campesinos murieron sin que aún se sepa cómo ocurrieron exactamente los hechos.
Tras la matanza del 15 de junio, el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y el Partido Colorado se aliaron para destituir a Lugo en el Parlamento.
A Lugo le sustituyó entonces el que era su vicepresidente, el liberal Federico Franco, que gobernó hasta agosto de 2013, cuando entregó el poder al ahora mandatario por el Partido Colorado, Horacio Cartes, expresa la agencia EFE.