Asunción, Agencia IP.- Mejoras edilicias y nuevos mobiliarios fueron entregados este miércoles al Centro Educativo N° 8.138 “Color Esperanza”, de Coronel Oviedo, espacio de atención educativa para niñas y niños que acompañan a sus madres privadas de libertad en la penitenciaría de mujeres “Serafina Dávalos”.
Las mejores se realizaron a través de una inversión global de G. 160 millones, en el marco del convenio específico N° 2 de cooperación interinstitucional entre el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) y el Ministerio de Justicia.
El acto de entrega de las mejoras contó con la presencia del ministro de Educación y Ciencias, Nicolás Zárate Rojas; el ministro de Justicia, Daniel Benítez, entre otras autoridades nacionales y madres beneficiadas.
Para el fortalecimiento de dicho espacio, la cartera educativa invierte cada año en talento humano la suma de G.112.000.000, además de la formación continua y capacitación de sus docentes.
Asimismo, los equipamientos de mobiliarios contemplan unos G. 20.820.000, y la dotación de equipos tecnológicos G. 10.280.000.
También está en proceso de adquisición un lote de materiales didácticos por un valor de G. 18.000.000, todos financiados con recursos del Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación (FEEI).
En la ocasión, el ministro de Educación y Ciencias, Nicolás Zárate Rojas, expresó que “la idea del MEC y del Gobierno Nacional es no dejar a ningún niño atrás. Todos ellos tienen derecho a una educación de calidad. Estamos seguros de que estos niños, el día de mañana, con la atención que tendrán en este espacio, van a tener un futuro hermoso, van a colaborar con sus familias, con la sociedad y, por qué no, serán nuestros próximos líderes. Le pido a las madres que no falten a las clases, que estén en las aulas, porque van a estar bien cuidados por nuestras docentes”.
Por su parte, el ministro de Justicia, Daniel Benítez, sostuvo que “con estas mejoras le estamos dando una oportunidad a estos chicos. El destino quiso que estén en esta situación pero nosotros, como Estado, no podemos desatender esa situación que se da. Los pequeños le están acompañando a sus madres que están privadas de libertad y debemos darles las herramientas para que ellos, el día de mañana, no caigan en este tipo de situaciones. Debemos trabajar con ellos desde temprana edad y prestarles la debida atención”.
Laura Figueredo, una de las madres beneficiadas con este proyecto educativo, manifestó que “estamos agradecidas a las autoridades por tenernos en cuenta y atender a nuestros niños que se encuentran en situación vulnerable. Esto permitirá que puedan alcanzar un buen desarrollo en su educación”.
El Centro Educativo N° 8.138 “Color Esperanza” atiende actualmente a un total de 4 niños y niñas, garantizando atención oportuna e integral durante su crecimiento y desarrollo, dando importancia a los lazos emocionales que se establecen entre la madre y su hijo/a.
El espacio de atención socioeducativo en contexto de encierro es un servicio educativo de la modalidad no formal dirigido a la atención integral y estimulación oportuna, durante los primeros mil días de vida, de aquellos niños y niñas que acompañan a sus madres privadas de libertad.
El mismo articula intervenciones educativas que promueven y promocionan el derecho a la educación, además de brindar acompañamiento a las madres privadas de libertad sobre el desarrollo de sus hijos, características, necesidades, pautas de crianza y estimulación oportuna de cada etapa de vida.