Para dignificar trabajo de recolectores vecinos de un barrio clasificarán sus basuras

Asunción, IP.- Mediante el proyecto piloto de “Asunción Limpia”, encabezado por jóvenes de diversas extracciones sociales, se pretende concienciar a los asuncenos acerca de la importancia de la clasificación de la basura para contribuir con la conservación del medio ambiente y dignificar a las personas involucradas en el proceso de recolección.

Este proyecto inicialmente se llevará a cabo con los vecinos del barrio Los Laureles, quienes fueron capacitados para separar correctamente sus desechos. Tendrá una duración de tres meses.

El lanzamiento de “Asunción Limpia”, está previsto para este sábado 12 de noviembre a las 09:30 en la Plaza Los Laureles (Teresa Lamas Caríssimo y Fulgencio R. Moreno), ubicada en el barrio del mismo nombre. Estarán presentes el intendente Mario Ferreiro, el concejal Sebastián Villarejo y el director de Servicios Urbanos, Rodrigo Velázquez.

En una primera instancia, el Villarejo se reunió con la comisión del Barrio Los Laureles y la organización Juventud que se Mueve (JQM) para coordinar trabajos con vecinos de 11 manzanas, con el fin de que puedan recibir capacitaciones acerca de cómo separar los desechos.

Las basuras domiciliarias serán clasificadas en cinco categorías: vidrios, plásticos, aluminios, papeles y cartones. Durante este plan piloto, se utilizarán bolsas de colores para fortalecer el aspecto educativo y un camión especial recolectará los residuos los días martes y sábados de cada semana.

El concejal impulsor de esta iniciativa, comentó que busca dignificar a todas las personas que forman parte del proceso de recolección de basuras.

“Los desechos que tenemos en nuestras casas son separados y clasificados por otras personas. Con este proyecto, queremos dar una mano a los recolectores y gancheros, quienes corren peligro todos los días, ya que la gente acostumbra a poner incluso vidrios entre sus basuras orgánicas”, mencionó.

Las 11 manzanas que se adhirieron a este plan piloto, podrán demostrar que es posible la organización comunal entorno a un tema que no está siendo atendido de la manera que corresponde.

Se espera que esta experiencia pueda constituir un ejemplo válido para otras comisiones vecinales que logren, en base a la organización de su comunidad, impactar positivamente en la conservación del ambiente y la dignificación de quienes trabajan con los desperdicios de la ciudad.

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