Asunción, IP.- A pesar de que Paraguay cuenta con una Ley de protección a los derechos de las personas con VIH, la Ley 3940/09 y que fue reglamentada en el año 2014, todavía hoy en día persisten situaciones de discriminación según la Red de ONGs que trabajan en VIH SIDA en Paraguay.
Actualmente se recepcionaron más de 1000 denuncias en poco menos de tres año de trabajo, mediante la linea gratuita habilitada *3535 desde Tigo. Por ello el Centro de Denuncias de VIH/SIDA y derechos humanos de la Red de ONGs, insiste en la importancia de denunciar estos casos con el fin de continuar con la lucha contra la discriminación y el estigma, documentar los casos, y hacer respetar los derechos de cada persona que vive o convive con el virus del VIH.
El estigma es un “atributo que desacredita socialmente a quien lo soporta, que queda sometido a reacciones adversas, de hostilidad y de rechazo, que favorecen la soledad y el aislamiento social” (Goffman, 1963). Además, puede producirse autoestigmatización cuando las personas con VIH interiorizan o anticipan las actitudes sociales que se experimentan en la sociedad. Puede ocasionar vergüenza o desprecio de sí mismo, sentimientos de culpabilidad y de inferioridad, que pasan a formar parte de su identidad favoreciendo situaciones de autoexclusión en múltiples ámbitos de la vida.
En 2001, ONUSIDA indicaba que el estigma relacionado con la infección por el VIH podría ser el obstáculo más grande al que las personas y las comunidades así como los políticos y los líderes religiosos que trabajan en la respuesta a la epidemia de VIH han de hacer frente. Un esfuerzo muy importante para responder al estigma no solo mejorará la calidad de vida de las personas infectadas por el VIH y de las personas que son sumamente vulnerables a la infección, sino que reúne las condiciones necesarias de una reacción a gran escala frente a la epidemia.
La discriminación se produce “cuando el estigma se instala” (ONUSIDA, 2005). Se considera discriminación arbitraria en relación con el VIH cualquier medida que acarree una distinción arbitraria entre las personas por razón de su estado de salud o su estado serológico respecto al VIH, confirmado o sospechado. La discriminación arbitraria puede ser el resultado de una acción o una omisión.
En este sentido, muchas personas con VIH han visto vulnerados algunos de sus derechos fundamentales debido a su enfermedad, como el acceso a seguros y prestaciones sociales, a oportunidades de trabajo o a la entrada como turistas o como trabajadores a determinados países.
Adoptar las medidas adecuadas para erradicar la discriminación hacia las personas con VIH y defender sus derechos es un reto fundamental en la respuesta a la epidemia.
Desde el punto de vista de la Salud Pública, el estigma que sufren las personas con VIH es un obstáculo para el acceso a los servicios de salud, al diagnóstico y al tratamiento. Los prejuicios acerca de las enfermedades infecciosas y en particular, las de transmisión sexual, así como la información errónea sobre las vías de transmisión del VIH provocan desigualdad en el acceso a servicios sanitarios, a prestaciones sociales, al mercado laboral o a la vivienda.
Por ello, se insta a las personas que sufren o pasan por una situación de discriminación a que se acerquen al Centro de Denuncias de VIH/sida y Derechos Humanos mediante todas las vías disponibles que son, la linea gratuita desde Tigo *3535, la linea baja 448-058, la oficina cuya dirección es Yegros 649 entre Herrera y Azara en Asunción, la página web www.denuncias-vih.org.py, en donde se encuentra habilitada una planilla para cargar los datos de las denuncias, las redes sociales Facebook y Twitter @centrodenuncias. Un equipo de abogados reciben la denuncia y acompañan a las victimas en su denuncias. El servicio es gratuito y totalmente confidencial.