Bogotá.- El presidente de Colombia, Iván Duque decretó el toque de queda en Bogotá y anunció un diálogo social.
Bogotá decretó el toque de queda a partir de las nueve de la noche (hora local) en toda la ciudad tras los actos vandálicos que se han producido en algunas zonas. El presidente Duque, anunció que sacará al Ejército a las calles en patrullas mixtas con la policía para garantizar el orden público, reporta El País.
Un día después de una enorme movilización en el país, la capital se dividió este viernes entre dos sonidos superpuestos: los cacerolazos de ciudadanos pacíficos y los de las bombas aturdidoras de la policía que se enfrentaron durante todo el día a actos vandálicos y saqueos que causaron el caos, sobre todo, en el sur de la urbe.
“Debemos rechazar categóricamente cualquier forma de violencia”, subrayó Duque en un mensaje televisado al comienzo de la noche del viernes. El presidente, que no había hablado durante la jornada, a excepción de algunos anuncios en Twitter, encabezó un Gabinete extraordinario y visitó el puesto de mando unificado para coordinar a las fuerzas de seguridad.
Además, afirmó que solicitó a los alcaldes de todo el país tomar las medidas pertinentes para salvaguardar el orden, que incluyen la ley seca y el toque de queda, donde sean necesarios.
“Para garantizar la seguridad en los lugares donde se está viendo perturbada la tranquilidad, he decidido fortalecer la presencia de la fuerza pública y aumentar las capacidades de inteligencia. He ordenado el despliegue de patrullas mixtas de la Policía y el Ejército Nacional en los lugares más críticos», añadió.
La decisión, que no se tomaba desde 1977, ha sido anunciada momentos después de que el alcalde de la capital, Enrique Peñalosa, decretase esta medida en tres zonas populares: los distritos de Bosa, Ciudad Bolívar y Kennedy. Aquí ha empezado a aplicarse una hora antes que en el resto de localidades de la capital: a las ocho de la tarde. Al menos 146 personas han sido detenidas.
En estas zonas se produjeron durante la jornada del viernes ataques a las estaciones del Transmilenio, el principal sistema de transporte de la capital, saqueos a supermercados y enfrentamientos con la policía.
En total, 76 estaciones del Transmilenio fueron atacadas y parcialmente destruidas, así como 79 autobuses del Sistema Integrado de Transporte (SITP), que funcionan en los barrios. A través de su cuenta de Twitter, Duque apoyó la medida para detener estos actos.
Tras las críticas que ha recibido el presidente por no dar respuestas a las reivindicaciones de los ciudadanos que salieron masivamente a manifestarse el jueves, Duque llamó a una conversación nacional a partir del miércoles con diversos sectores sociales.
Con ello, el mandatario pretende “fortalecer la agenda vigente de política social”, cerrar las brechas sociales y luchar contra la corrupción. Ese diálogo “se hará en las regiones con todos los sectores sociales y políticos”, empleará nuevas tecnologías y mecanismos participativos para todos los colombianos con el propósito de establecer un cronograma claro para “un camino significativo de reformas”, aunque no detalló cuáles serán.
Mientras la policía antidisturbios continuaba tratando de dispersar a estos grupos que han sembrado el caos en el sur de la capital, miles de bogotanos han caminado largas horas intentando llegar a sus casas, debido a la suspensión total del Transmilenio. Otros han ido apiñados e incluso colgados de autobuses y hay quienes se han subido a pick-ups para tratar de llegar al sur de la ciudad.