Asunción, IP.- El administrador del Puerto Itá Enramada, Victor Olmedo, informó que a raíz de la crecida del río, el puerto dejó de realizar operaciones aduaneras pero que se está operando vía tránsito a través de la Aduana de Falcón que también ya se encuentra con problemas por la inundaciones.
En comunicación con Radio Nacional del Paraguay, Olmedo explicó que desde hace una semana pararon las operaciones de despacho en Itá Enramada, «el agua amaneció tomando casi el 80 por ciento del patio de contenedores que entran para hacer su despacho de importación aquí y todas las operaciones de importación de camiones o por otro tipo de medios están totalmente suspendidas, son nulas las operaciones comerciales aquí en este momento en el puerto Itá Enramada.
«Todo se está operando vía tránsito a través de la aduana de falcón y tropezamos con varias dificultades, aun cuando el puerto de Falcón es una aduana de gran ingreso de mercaderías igual tropezamos nosotros con dificultades para poder realizar los tránsitos respectivos hacina nuestra aduana de tal manera a poder despachar nosotros y así poder mantener mínimamente operativa esta administración».
Asimismo, aseguró que las gráficas son elocuentes, «las fotos muestran crudamente la realidad que nosotros estamos soportando en este momento, todo se torna muy difícil de trabajar allí y creo que esto duraría bastante tiempo mas por que la Aduana Argentina tiene su procedimiento como para volver a rehabilitar el puerto del Pilcomayo principalmente».
Comentó además que pudieron haber trabajado unos días más pero que en realidad es la Aduana Argentina que tomo la determinación de suspender totalmente las actividades ya que el agua rebasó y hasta llegaron a las oficinas administrativas del puerto Pilcomayo.
Olvedo finalmente dijo que a pesar de este problemas las recaudaciones no se ven afectadas hasta el momento puesto que ya se superó la recaudación con relación al mismo mes del año anterior, pero insistió que actualmente el Puerto Falcón tambien ya presenta problemas por la crecida del río, pero que por lo menos sigue activo.