Londres.-El Reino Unido anunció hoy una nueva ola de sanciones dirigidas a empresas e individuos vinculados a la capacidad financiera y militar de Rusia, en el marco de su política punitoria por la invasión a Ucrania.
Estas sanciones, que abarcan un total de 86 designaciones, tienen como objetivo específico sectores clave como la energía, los metales, la defensa, el transporte y las finanzas en Rusia.
El primer ministro británico, Rishi Sunak, anunció estas medidas en el marco de la Cumbre del G7 en Japón, donde también se anunciaron prohibiciones de importación de diamantes y metales rusos.
Estas sanciones incluyen medidas enérgicas contra personas y entidades sospechosas de estar involucradas en el robo y la reventa de grano ucraniano, así como contra las principales empresas de transporte de energía y armas de Rusia.
Además, se han sancionado empresas vinculadas a Rosatom (holding de empresas estatales rusas) que producen materiales y tecnología avanzados, como láseres, utilizados en apoyo a los esfuerzos militares del presidente Vladimir Putin.
El Reino Unido también anunció que mantendrá inmovilizados los activos soberanos de Rusia hasta que acepten pagar por los daños causados en Ucrania.
«Creemos en la democracia, la libertad, el estado de derecho, y es correcto que defendamos esas cosas», dijo Sunak a la BBC.
«Tengo esperanzas y confío en que nuestros países socios seguirán como lo han hecho cuando hemos hecho esto anteriormente. Eso hará que las sanciones sean más efectivas, garantizará que Rusia pague un precio por su actividad ilegal”, agregó.
El ministro de Relaciones Exteriores, James Cleverly, por su parte declaró que «Putin y sus partidarios deben, y pagarán, el precio de su invasión ilegal a Ucrania».
«Continuaremos aumentando esta presión y tomando medidas enérgicas contra todas las formas emergentes de elusión hasta que Ucrania prevalezca y se asegure la paz», subrayó en el comunicado.
Estas sanciones son parte de un paquete más amplio que fue implementado por el Reino Unido y sus socios del G7, con el objetivo de socavar la maquinaria de guerra de Rusia.
Hasta ahora, se han sancionado a más de 1.500 personas y entidades, congelando activos por más de 18.000 millones de libras esterlinas y sancionando más de 20.000 millones de libras esterlinas en el comercio de bienes entre el Reino Unido y Rusia.Télam.