Asunción, IP.- En el Día Mundial de Lucha contra el Sida que se conmemora este viernes, el ministro de Salud Pública, Antonio Barrios, reconoció que pese a los logros alcanzados en cuanto al tratamiento y la descentralización de servicios, la materia pendiente sigue siendo el estigma y la discriminación de la que son víctimas las personas que viven con la enfermedad.
El acto de conmemoración se realizó esta mañana en la sede de la cartera sanitaria, del que participaron autoridades, funcionarios, sociedad civil, entre otros. En la oportunidad, Barrios reconoció que pese a los resultados obtenidos en los últimos años, falta lo más importante que es superar la discriminación. «Todo lo podemos conseguir con una administración sana, que se compromete y dedica”, dijo.
Reiteró que la discriminación sigue siendo una materia pendiente en Paraguay, lamentando que muchas de las personas abandonan el tratamiento a raíz de la discriminación de las que son víctimas en los servicios sanitarios.
“Es un tema que me duele porque lo hacemos nosotros los médicos, los funcionarios de salud y me cuesta mucho entender el por qué. Esa tarea que va hacer tremendamente difícil va a tenerlo el próximo ministro o ministra que ocupe la cartera, debemos de buscar una estrategia diferentes para poder llegar a nuestros funcionarios”, reflexionó.
Sobre el punto dijo que la difusión de todos los contenidos relacionados a la enfermedad debe involucrar fuertemente al Ministerio de Salud, para evitar que más personas sigan contagiándose de una enfermedad “totalmente prevenible”.
“Espero que de aquí a cuatro años podamos superar la gran brecha que existe para el reconocimiento de todos los derechos”, refirió.
De acuerdo con la OMS, las vías de transmisión son las relaciones sexuales vaginales, anales u orales con una persona infectada, la transfusión de sangre que contenga el virus o el uso compartido de agujas, jeringuillas u otros instrumentos punzantes, así como de la madre al hijo durante el embarazo, el parto y la lactancia. Por lo tanto, no se transmite por compartir platos, beber del mismo vaso, toser, estornudar, tocarse, besarse o acariciarse, compartir duchas, piscinas, alimentos, objetos, aseos y lugares públicos en general.
Cada 1 de diciembre se celebra el Día Mundial de la Lucha contra el Sida. Es una oportunidad para concienciar, educar y mejorar la comprensión del VIH como un problema de salud pública mundial. Este año, el lema que la Organización Panamericana de la Salud propone para el Día Mundial de la Lucha contra el Sida 2017 es: “Todos cuentan. Terminemos con el Sida”.
Por su parte, la directora del Programa Nacional de Lucha contra el Sida (Pronasida), Tania Samudio, mencionó que Paraguay se suma a la conmemoración bajo el lema “Todos cuentan en la prevención del VIH”.
En el país sudamericano más de 1.000 personas fueron diagnosticadas hasta agosto de este año, siendo los varones lo más afectados con el 69 por ciento de los casos y un 31 por ciento mujeres. La enfermedad afecta principalmente a jóvenes que no superan los 30 años.
Comentó que desde hace 30 años vienen trabajando en las áreas de prevención, promoción, diagnóstico, tratamiento y seguimiento de las personas con VIH.
En ese sentido, dijo que en los últimos cuatro años se desarrollaron tareas conjuntas para la descentralización de la atención de las personas que están contagiadas con la enfermedad en los servicios que forman parte de la red del Ministerio de Salud Pública, en el cual se estableció el tratamiento universal como política de Estado, logrando que todos los paraguayos puedan acceder a los beneficios del sistema de salud, mejorando su calidad de vida.
Aseguró que se han concretado avances positivos alcanzando una cobertura a nivel nacional en cuanto al acceso al diagnóstico, el tratamiento para todas las embarazadas con VIH y recién nacidos, así como la descentralización de los servicios de atención pasando de seis a establecimientos de atención integral.
“En referencia al tratamiento con retrovirales, más de 7.000 personas se encuentran con el tratamiento, distribuidos en un 80 por ciento en Asunción y el resto en las demás regiones sanitarias”, detalló Samudio. Pese a los avances, reconoció que aún resta mucho por hacer entre ellos, el de seguir trabajando para disminuir el estigma y la discriminación en referencia al VIH en el personal de salud y en la ciudadanía toda.
Estrategias más efectivas en materia de educación y prevención, donde el trabajo articulado con otros actores como el Ministerio de Educación son relevantes claves para alcanzar los objetivos, también mejorar la adherencia al tratamiento antirretroviral de las personas que viven con VIH, fortalecer la oferta de los servicios en las distintas regiones sanitarias y en las unidades de salud familiar.
“Queda mucho por avanzar pero solos no podemos, necesitamos de la ayuda de todos, como dice el lema todos cuentan en la prevención del VIH”, expresó.
A su turno, el representante de la OPS/OMS en Paraguay, Luis Roberto Scotto, alertó que en el 2006 el 40 por ciento de las nuevas infecciones a nivel mundial por el VIH ocurrió en las poblaciones más vulnerables, y de ellas solo uno de cada tres pudo acceder al tratamiento retroviral.
“Las personas con VIH y aquellas con riesgo de contraer el virus deben tener acceso a servicios de alta calidad”, expresó.
Mencionó que los países necesitan fomentar esfuerzos para lograr la cobertura de salud universal y eliminar el Sida para el 2020. “Hacemos un llamado para que la respuesta al VIH sea fuerte y nos conduzca a sistemas de salud todavía más robustos”, añadió.