Séptimo concierto de la Orquesta del Congreso en la BIA 2015

Asunción, IP.- Este jueves tendrá lugar el Séptimo Concierto de la Temporada Oficial Internacional 2015 de la Orquesta Sinfónica del Congreso de la Nación (OSIC), bajo la dirección del maestro Diego Sánchez Haase. La gala se realizará en el marco de la Primera Bienal Internacional de Arte de Asunción, que se desarrolla durante este mes en varios espacios de la capital. Será escenario el Teatro Municipal “Ignacio A. Pane”, ubicado sobre la calle Presidente Franco de Asunción. Como siempre el acceso es libre y gratuito.

En la ocación el repertorio está dedicado a la música de los Estados Unidos de Norteamérica y de Inglaterra, con la interpretación de piezas de dos de los mayores creadores de ambos países: el norteamericano Georg Gerswhin y el inglés Sir Edward Elgar.

La orquesta interpretará el repertorio en compañía de dos jóvenes y talentosos músicos paraguayos: el pianista Oscar Aldama – residente en Sao Paulo, Brasil- y el jefe de fila de violoncellos de la OSIC, Benjamín Báez. El programa elaborado para la fecha incluye: Rhapsody in Blue, de Gershwin. Será solista, al piano, el músico Oscar Aldama. En el espacio de “Los virtuosos de la orquesta”, se escuchará el Concierto para Violoncello y orquesta en mi menor Op. 85, de Elgar;  que tendrá como solista en el violoncello al músico Benjamín Báez.

Rhapsody in Blue  es una obra que ayudó definitivamente a que se considerara el jazz como música “seria”, digna de oírse en las más selectas salas de conciertos del mundo. El famoso director Paul Whiteman escuchó a George Gershwin y le invitó a componer una pieza sinfónica de jazz, para tocarla junto con otros estrenos de compositores modernos en un concierto que daría próximamente con su banda.

Elgar, por su parte, escribió el concierto en 1919, justo después de la Primera Guerra Mundial. Horrorizado y desilusionado por el sufrimiento causado por la guerra, se dio cuenta de que la vida en Europa nunca sería la misma después de esa destrucción. Elgar vierte sus sentimientos en cuatro obras que se encuentran entre los mejores que jamás compuso. Las tres primeras eran obras de cámara en las que se desarrolla una nueva voz musical, más concisa y tenue que la anterior.

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