Tráfico Ilicíto de bienes culturales mueve 15 millones de dólares al año

Asunción, IP.- El Tráfico ilícito de bienes culturales ocupa el cuarto lugar de combate entre los crímenes organizados trasnacionales como el tráfico de drogas, armas y personas, moviendo anualmente un aproximado de 15 millones de dólares.

El denominado  “robo del siglo”, perpetrado en el año 2002 en el Museo Nacional de Bellas Artes, fue el puntapié inicial para urgir determinaciones que ayuden a salvaguardar el patrimonio. El caso, ocurrido en el 2002, recibió esta denominación pues consistió en la sustracción de cinco piezas del Museo Nacional de Bellas Artes. El caso se convirtió en polémico debido a que los ladrones eran profesionales pues conocían el valor de las piezas.

Para dar cuenta de este flagelo, el 19 y el 20 de octubre próximos se realizará la Reunión Inter-plataformas Unasur – Mercosur sobre “Prevención y Combate al Tráfico Ilícito de Bienes Culturales”. Tal acción responde a la Declaración de Ministros del Interior del Mercosur y a la Declaración de Ministros del Consejo Suramericano de Cultura – Unasur. La Reunión Inter-plataformas constituye una acción que materializa la decisión de convergencia y articulación de ambas plataformas regionales y establecer procedimientos para unificar la información en una base de datos compartida.

Desde Paraguay, la Secretaría Nacional de Cultura (SNC) está coordinando la organización de la mencionada reunión, en forma conjunta con el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Ministerio del Interior.

Otro notable caso que elevó a este tipo de crímenes organizados a una situación alarmante, es el ocurrido en el 2012, cuando el acervo privado de la familia Duarte Burró fue violentado con el robo de más de 120 obras de arte, de las cuales fueron recuperadas 85.

La organización internacional Interpol cuenta desde el 20145 con un departamento de bienes culturales que debe relevar datos puntuales en su base de datos, situación que obliga a condicionar todos los casos de robos que todavía no fueron informados y que aún obran en otras instituciones como el Ministerio Público o la Policía Nacional.

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