Asunción, IP.- Un total de 30 niños y niñas indígenas fueron rescatados este miércoles de la zona de la terminal, mediante un operativo realizado por el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia. La institución busca la reinserción de los niños de pueblos originarios a sus comunidades.
En conversación con Radio Nacional del Paraguay, la minstra de la Niñez, Teresa Martínez, indicó que esta es la es la quinta vez que la institución realiza este tipo de operativos en la zona de la terminal, desde el mes de agosto. «Los hacemos aunque parezcan estériles porque a los 15 días ya tenemos nuevamente otro grupo de niños», mencionó
Consideró que «mientras no se tomen las medidas con los adultos y no se haga una política pública de atención a los indígenas que llegan hasta los centros urbanos no vamos a parar con esta situación». En la intervención de este miércoles, el Ministerio Público imputó a uno de los adultos que traen a los niños para que estos salgan a pedir limosna en las calles.
«Diariamente como 30 llamadas de gente que avisa que hay niños indígenas en la capital y en estas fechas de fin de año es muy peligroso, por eso se decidió intervenir una vez más en esa zona», dijo la ministra Martínez.
Tras la intervención los chicos están bajo protección del Ministerio de la Niñez en su centro de abrigo y los trabajadores sociales de la institución se comunicarán con sus familias a los efectos de restituirlos a sus comunidades, explicó la ministra.
«Ellos pasan por un proceso, se les va a hacer un diagnóstico médico, se corrobora su identidad, posteriormente se habla con las familias con quienes supuestamente vinieron y se va individualizando si hay un vínculo parental, o sino se le restituye a su comunidad a cargo del líder», indicó.
En algunos casos, los niños son asignados a centros de rehabilitación de adicciones, porque muchos de ellos terminan adictos a la cola de zapatero y a otro tipo de sustancias durante su vida callejera. Para esos casos, el Ministerio ha habilitado un centro ubicado en Punta Porã y proyecta otro en Pindo’i, ambos en el departamento de Caaguazú.