Asunción, Paraguay, Agencia IP.- El economista Manuel Ferreira calificó de fundamental la asistencia impulsada por el Gobierno para atender a las familias más afectadas económicamente por la pandemia de covid-19, ya que de no haberse desplegado dicha ayuda, el número de pobres hubiera aumentado exponencialmente.
“Siempre me llamó la atención escuchar “cada vez hay más pobres” de mucha gente. Sin embargo, en los últimos 22 años la pobreza extrema bajó de 12 por ciento a 3,9 por ciento y la pobreza total de 40 por ciento a 26,9 por ciento”, expuso Ferreira a través de su cuenta oficial en Twitter.
En ese sentido, destacó el impacto positivo generado por los programas de contención impulsados por el Gobierno como el caso de Ñangareko, Tekoporã y Pytyvõ, que permitieron garantizar la seguridad alimentaria de las familias, principalmente aquellas que se vieron afectadas económicamente por la pandemia del coronavirus.
“El programa Pytyvõ ha sido una de las herramientas que más resultado ha dado durante esta pandemia, dado que fue organizado de una manera tal que permitió que la gente pueda acceder sin distinción de ningún tipo de bandería, si esto se hubiese canalizado por otra vía se hubiese perdido de este dinero y no llegar a la población de destino”, explicó.
Sobre el mismo punto, sostuvo que el paquete de iniciativas sociales desplegados por el Ejecutivo representaron en promedio el 20 por ciento de ingreso de los trabajadores más vulnerables. “Esto ha sido extremadamente importante para sostener la economía durante el año 2020”, recalcó.
En esa línea se preguntó ¿Qué hubiese pasado si no existía ayuda durante la pandemia?, hubieran habido 184.000 pobres extremos más y 233.000 pobres totales más. Esta ayuda ha sido fundamental”, remarcó.
En otro momento admitió que alrededor del 37 por ciento de la población paraguaya se concentra en las zonas rurales, lo que hace que sea una especie de refugio. Sobre el punto, alegó que muchas personas volvieron al campo tras quedar desempleados debido a la crisis.
“Lo que vimos durante el 2020 es que todas las políticas publicas de apoyo fueron vinculadas a la demanda, es decir se ha transferido dinero a la gente para que pueda gastar, sin embargo en este caso haría falta posiblemente un subsidio a la oferta, principalmente en el sector agropecuario que permita que esta gente pueda tener un nivel de vida más importante en estos sectores mientras aguanta el tema de la pandemia”, aconsejó.
Asimismo reconoció que se concretaron importantes avances, no obstante queda mucho camino por recorrer para salvaguardar las fuentes de trabajo y ante todo, evitar que más familias caigan en la pobreza. “Los paraguayos tenemos el orgullo de llevar el pan a nuestra casa, la pandemia nos dejó con 233.000 paraguayos pobres y el sector urbano fue más afectado que el rural”, agregó.
La mejor política económica que debe encarar el Gobierno es la vacunación masiva
El especialista consideró que la mejor política económica que debe encarar el Gobierno es la vacunación masiva de su población, ya que eso posibilitará que se tenga que recurrir a las medidas restrictivas.
“Un problema serio es que el Estado tiene poco espacio fiscal para poder seguir gastando en subsidios directos, en la medida que estos se hagan y se siga financiando con deuda, lo único que hacemos es generar rigidez a nuestro presupuesto y eso puede ser una complicación”, advirtió.
Teniendo en cuenta lo señalado anteriormente, remarcó finalmente que la vacunación es la política más eficiente, que debe ir acompañado de proyectos monetarios enfocados en la refinanciación de deudas y apoyo a microemprendedores, debido a que son los mayores empleadores del sistema y son las que pueden ayudar a superar la complicada situación por la que atraviesan en la actualidad los paraguayos y paraguayas.