Pyongyang.- Corea del Norte informó que probó un “nuevo” misil antiaéreo, mientras Estados Unidos la acusó de alentar “inestabilidad e inseguridad”. El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá hoy para analizar la situación.
El Ejército norcoreano “ensayó” hoy (por ayer) “un misil antiaéreo de nuevo desarrollo” y “se comprobó” su “gran eficacia de combate” gracias a “la introducción de nuevas tecnologías claves”, reportó la agencia noticiosa estatal KCNA.
El régimen de Pyongyang, que tiene armamento nuclear, realizó otros ensayos en las últimas semanas, incluido este martes el de un misil de planeo hipersónico, que quintuplica la velocidad del sonido y es más difícil de interceptar que los comunes, lo que desató una inmediata reacción internacional.
Por un lado, Estados Unidos, Francia y el Reino Unido pidieron una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU, que iba a realizarse hoy y fue aplazada para mañana a solicitud de China y Rusia, según fuentes diplomáticas citadas por la agencia de noticias AFP.
Por otra parte, Washington reiteró su alarma por la escalada de ensayos de armas nucleares por parte de Pyongyang.
“Estamos preocupados por estas repetidas violaciones de las resoluciones del Consejo de Seguridad que crean mayores perspectivas de inestabilidad e inseguridad”, afirmó el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, a periodistas en Pittsburgh.
Blinken subrayó que Estados Unidos no podía confirmar si Corea del Norte probó un misil hipersónico: “Estamos evaluando los lanzamientos para entender exactamente lo que hicieron, qué tecnología usaron”, dijo.
La tensión entre Washington y Pyongyang había vuelto a escalar ayer, cuando el líder norcoreano, Kim Jong-un, rechazó una propuesta de diálogo de la Casa Blanca y la consideró una “fachada para enmascarar su decepción y sus actos hostiles”.
Las partes iniciaron conversaciones durante el mandato de Donald Trump, pero quedaron interrumpidas en 2019, tras el fracaso de la segunda cumbre entre él y Kim.
Desde su llegada a la Casa Blanca, en enero de este año, el gobierno del presidente Joe Biden propuso en varias ocasiones reunirse con el de Kim, en cualquier lugar y sin condiciones previas.
El líder norcoreano sostuvo que esa propuesta es «nada más que una fachada para enmascarar su decepción y sus actos hostiles, y una extensión de la política hostil de anteriores administraciones» estadounidenses, según el diario oficial Rodong Sinmun.
Con la llegada de Biden, «la amenaza militar estadounidense y la política hostil hacia nosotros no cambiaron en absoluto, sino que se volvieron más maliciosas», agregó Kim en un discurso ante el parlamento.
En cambio, Kim anunció que a “principios de octubre” se restablecerá la comunicación entre Corea del Norte y Corea del Sur, interrumpida en agosto, aunque criticó a Seúl por participar en ejercicios militares junto a Estados Unidos y le pidió que “salga del engaño de que debería contener las provocaciones” de Pyongyang.Télam