Lima.-El secretario general de la Presidencia de Perú, Bruno Pacheco, presentó su dimisión por un escándalo desatado por presuntas presiones para ascensos irregulares en las Fuerzas Armadas, y se suma a la ola de renuncias e impugnaciones de figuras relevantes del presidente Pedro Castillo.
«Renuncio al cargo con la convicción de que no he cometido nada indebido», dijo Pacheco a través de su cuenta en Twitter, en el que aseguró que su dimisión se produce para evitar que Castillo «sea objeto de esta campaña de desprestigio».
El ahora exfuncionario subrayó su «respeto incondicional» por el mandatario peruano y aseguró que no será «el pretexto de unos y otros para golpear al líder del Gobierno del pueblo y la democracia».
Varios excomandantes del Ejército peruano denunciaron presiones para tratar de forzar determinados ascensos en las Fuerzas Armadas.
El mandato de Castillo, que acaba de cumplir el hito de cien días, arrancó con una sucesión de polémicas que motivaron varios cambios en el Gobierno en poco tiempo.
Entre los altos cargos que dimitieron figura el ministro del Interior, Luis Barranzuela, por violar las restricciones sanitarias al organizar una fiesta de Halloween.
La renuncia de Pacheco coincide con el anuncio de que el ministro de Transporte y Comunicaciones, Juan Silva Villegas, deberá presentarse ante el Congreso para ser interpelado el próximo jueves 25 de noviembre.
Así lo anunció en las últimas horas la presidenta del Poder legislativo, Alba Prieto, un día después de que el Parlamento unicameral aprobara con 48 votos a favor, 57 en contra y dos abstenciones la moción de interpelación contra el funcionario a fin de que explique presuntas irregularidades en su sector.
La moción 1057, promovida por la bancada de la derechista Fuerza Popular (FP), de Keiko Fujimori, consta de un total de 47 interrogantes que deberá responder el ministro.
Durante la defensa de la moción, el congresista Hernando Guerra García (FP) resaltó que desde la gestión de Silva Villegas «se han dado evidencias de que la reforma del transportes está amenazada».
En la sesión plenaria realizada ayer también se dieron cuenta dos mociones que proponen interpelar al ministro de Educación, Carlos Gallardo, sindicado «responsable político» de la filtración de las pruebas nacionales de evaluación docente.
Diversas bancadas se sumaron a la moción apuntando que «la inexperiencia y falta de capacidad» de Silva para desempeñar las funciones de su cargo, derivaron en «desaciertos e ilegalidades», entre las que señalan las contrataciones a personas en el Ministerio.
Entre otras consultas, Silva deberá responder sobre la decisión del Gobierno de reorganizar la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías y la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao.
Esta misma votación ya se llevó a cabo la semana pasada, cuando obtuvo el apoyo de 27 legisladores, mientras que 48 votaron en contra y 39 se abstuvieron.
Entre las abstenciones se encontraban los miembros de FP, quienes más tarde reconocieron que interrogar al titular de Transportes y Comunicaciones le hubiera restado protagonismo a la interpelación en curso en ese momento del exministro de Defensa Walter Ayala, quien finalmente dimitió antes de que este proceso se llevase a cabo.Télam.