Asunción, Agencia IP.- Las plantas de tratamiento de aguas residuales cuya construcción encaró el actual gobierno cambiarán la calidad de vida de más de 2.500.000 paraguayos y generarán un gran impacto ambiental, destacó el presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
El actual gobierno encaró la construcción de al menos tres grandes plantas de tratamiento de aguas residuales en Asunción y el departamento Central, zona en que se concentra la mayor densidad poblacional y que requiere de este tipo de obras.
De hecho, en Varadero, Asunción, ya fue habilitado en marzo de 2021 la primera de estas plantas de tratamiento de aguas residuales y su puesta en marcha representó un punto de inflexión en el proceso de desarrollo urbano de la ciudad.
La PTAR de Varadero tiene capacidad procesar un caudal de 760 litros de efluentes cloacales por segundo, provenientes de los barrios situados en el microcentro y las áreas colindantes. De esta manera beneficia directamente a unas 250.000 personas.
Por otro lado, actualmente tiene un avance del 80% la planta de tratamiento de aguas residuales de Bella Vista, Asunción, la cual beneficiará a unas 1.200.000 de Asunción, Fernando de la Mora y Luque.
Esta planta de tratamiento ocupará un área de 8.100 metros cuadrados y estará en condiciones de filtrar, por segundo, un caudal de 4.400 litros de aguas residuales.
Finalmente, también están avanzadas, en un 84%, las obras de la planta de tratamiento de aguas residuales de San Lorenzo, que mejorará las condiciones ambientales del entorno, así como los indicadores de salud y calidad de vida de un total de 600.000 personas.
Esta obra, a su vez, impactará de manera positiva en toda la cuenca del emblemático lago Ypacaraí –seriamente afectado por la contaminación-, de la cual forma parte, como afluente del arroyo Yuquyry.